En archive.org han publicado un número impresionante, 400.000.000.000 de páginas web indexadas por esta «máquina del tiempo de Internet», proyecto que nos permite ver el aspecto y el contenido de cualquier sitio web en el pasado.
Allí podemos ver contenido desde 1996 (como el aspecto de yahoo), la primera versión de google, el clásico geocities en el 98… en el mismo artículo comentan algunos puntos importantes de su historia, como la asociación que hicieron en 2009 con Sun Microsystems para lanzar un nuevo centro de datos que almacena todo el archivo Web, un centro de datos de 3 petabyte que gestiona 500 solicitudes por segundo, o los 80 terabytes de datos de páginas rastreadas en 2012.
La Wayback Machine es algo más que un experimento curioso, sirve para mucho más que para cotillear entre el pasado de sitios web, puede ayudarnos a tener acceso a importantes sitios que fueron cerrados por causa de la censura, ayudando así a registrar la historia de una forma que ningún otro proyecto puede hacer en la actualidad.
Si estáis curiosos, entrad en archive.org y empezad a buscar entre vuestros sitios web preferidos, os impresionará la cantidad de detalles que es capaz de guardar.
Ocupando un espacio ocupado por Dropbox, Wetransfer, yousendit y muchas otras opciones ampliamente utilizadas a la hora de enviar archivos de gran tamaño, WireOver (wireover.com) se asoma a la categoría con una solución que permite enviar archivos pesados de forma gratuita y de cualquier tamaño (y de forma segura si se pagan 10 dólares al mes).
Así es, esa es la diferencia entre el plan gratuito y la opcion Pro: la de pago ofrece un sistema de cifrado anti-NSA, garantizando que nadie será capaz de verificar el contenido del archivo que se está enviando.
Trent Ashburn, su creador, comentó en Techcrunch que, a diferencia de otras soluciones, con WireOver el cifrado es constante, de punta a punta, no hay forma de saber lo que se está transmitiendo, ni siquiera por el propio WireOver, ya que ellos no realizan ninguna operación para cifrar y guardar de nuevo los archivos (no disponen de las llaves necesarias).
Tanto el origen como el destino deben instalar el programa (disponible para Mac y Windows, con Linux en camino) para que la transferencia se realice con éxito. La transferencia se realiza de punta a punta, por lo que no hay problema si queréis enviar a alguien un archivo de 200 gigas usando este sistema, lo realizará de forma gratuita, sin pasar por ningún servidor, semejante a lo que hace Pipebytes.
No es la primera vez que vemos algo así, en 2011 ya os mostramos tres opciones parecidas, aunque de ellas parece que solo pipebytes ha conseguido sobrevivir hasta hoy.
Entre otros datos de extremo interés vemos como no son solo las compañías relacionadas con el cine o la música las que más solicitan retirar contenido, estando dicha lista liderada por Marketly llc y con Microsoft como el mayor propietario de material protegido.
Los sitios más afectados por estas peticiones suelen ser los de servicios de almacenamiento de archivo, como Filestube, quien encabeza la lista.
Según nos comenta Google, los datos son de Julio de 2011, aunque prometen actualizar a diario la información con las últimas peticiones solicitadas.
Os recomiendo leer el artículo, en español, de Fred von Lohmann, abogado sénior especializado en derechos de autor, comentando dichos informes.
Droplr anuncia su plan Pro con una oferta que pone los dientes largos a los que estamos acostumbrados a usar otras soluciones a la hora de compartir archivos. Con posibilidad de subir archivos de hasta 1 giga de tamaño, ofrece 100 gigas por 3 dólares al mes, o por 30 dólares al año, lo que lo hace más barato aún.
El mismo espacio (100GB) en Google Drive cuesta 4,99 dólares al mes, y en Dropbox 19,99, aunque en este caso Droplr no tiene sistema de sincronización de directorios entre ordenadores, algo extremadamente importante en los tiempos que corren.
La versión gratuita permite subir archivos de hasta 25 megas, con un espacio total de 1 Giga para cada usuario.
Con versión para Mac y Windows, podéis usar la aplicación web en droplr.com y consultar el plan Pro en droplr.com/pro
Buscando en Google con define: delante obtendremos la definición de cualquier palabra directamente en el buscador, con la opción de escuchar el sonido de la pronunciación de la misma. Lo que no es tan conocido, y que indican en labnol.org, es que podemos obtener el archivo mp3 con el sonido de cada palabra usando directamente esta url
De esta forma, poniendo https://ssl.gstatic.com/dictionary/static/sounds/de/0/car.mp3 tendremos el sonido de la pronunciación de la palabra CAR (coche) en inglés, poniendo https://ssl.gstatic.com/dictionary/static/sounds/de/0/woman.mp3 tendremos el sonido de la palabra WOMAN (mujer), etc.
Enviar una captura de pantalla por email cada vez es más sencillo, eliminando esos terribles bmps que estuvieron invadiendo los emails corporativos durante más años de los que quiero recordar.
Los programas de captura de pantalla son cada vez más sencillos y prácticos, aunque siguen naciendo opciones que intentan transformar esta tarea en un verdadero juego de niños.
Es así como quiero presentaros snag.gy, una aplicación donde, después de haber copiado en el portapapeles de nuestro ordenador cualquier imagen, aloja el archivo con solo recibir la orden CTRL+V.
Al pegarse la imagen, podremos recortarla y usar un editor sencillo antes de divulgar el resultado vía una url única.
snaggy recoge cualquier imagen guardada en el portapapeles, sea de la web o de nuestro ordenador, olvidando el clásico botón de upload al que estamos acostumbrados.
ebookdatabase.net se presenta como un buscador capaz de rastrear la web en busca de documentos en diversos formatos. Presumen de tener indexados más de 100 millones de archivos, incluyendo medio millón de nuevos documentos cada día, permitiendo así encontrar información que en otros buscadores no aparecería de forma tan sencilla.
Rastrean blogs, foros, BBS.. todo con el objetivo de tener el mayor índice de documentos de Internet, permitiendo ordenadar los resultados por fecha y tamaño, aunque por desgracia no los clasifica por idioma.
Es posible visualizar el contenido antes de bajarlo, así como incluirlo en nuestra página web usando el código embed disponible en cada documento.
Internet, entre otras cosas, nos permite visitar las páginas con contenidos que son de nuestro interés. A lo largo del tiempo, son muchas las páginas que visitamos, e incluso solemos guardar los enlaces de las páginas que nos interesan acceder más adelante en nuestros marcadores, ya sean los de nuestro propio navegador o acudiendo a los servicios de la nube, como Delicious. Pero igual nos interesará volver a buscar en las páginas que hemos accedido previamente.
Pues para esto hay una solución llamada Archify, un nuevo sitio web que funciona mediante plugins para los navegadores web, y se encuentra en fase beta privada, cuya apertura pública se espera a finales del primer trimestre de este 2012, que nos permite tener un historial de páginas que hemos visitado, indexando el contenido de las mismas en el momento en el que las visitamos, pudiendo acceder posteriormente mediante búsquedas tanto a los contenidos de los sitios visitados como de las publicaciones sociales que tengamos en nuestras cuentas de Twitter y Facebook, en caso de que las conectemos con Archivy.
De esta manera, a la hora de realizar cualquier búsqueda en cualquier motor de búsquedas de Internet, dentro de los resultados, se nos aparecerá una nueva capa con un mensaje que nos informará de que también tiene otros resultados de búsquedas, que corresponderán a los archivos generados durante nuestra navegación, y que además nos permitirá realizar una serie de filtrados sobre las mismas. Hay que tener en cuenta que Archivy sólo obtendrá capturas de los sitios web que visitamos sin cifrado de las conexiones, de manera que no capturará los contenidos bajo https o bajo el modo de navegación en modo incógnito.
De momento tiene que depurar algunos errores, como la actualización a su nombre actual en los mensajes y extensiones para el navegador, llamado anteriormente egoArchive, e introducirse algunas nuevas características antes de abrirse al público, como es el hecho de la geolocalización, de manera que más adelante podemos buscar contenidos que hayamos visitado desde una ubicación en concreto. También se incluirá tecnologías de gráfico social, etiquetas, compartición, favoritos, etc, estando algunas de estas características en las futura opción premium del servicio.
Por ahora sólo cabe esperar a recibir la invitación si la hemos solicitado desde su sitio web, o esperar a su salida como beta pública. También hay que tener en cuenta que con el plugin en nuestro navegador también estamos cargando más trabajo de proceso a nuestro sistema informático.
Filefiend se presenta como una nueva opción que podemos usar para guardar archivos y compartirlos con los amigos, existiendo una sección desde donde podremos ver todo lo que nuestros contactos están subiendo en cada momento.
Podemos crear grupos de contactos para compartir diferente material entre diferentes perfiles, siendo una buena opción para distribuir archivos entre diferentes grupos de trabajo.
Si encontramos un archivo de alguien interesante, podremos copiarlo a nuestra cuenta, sin necesidad de bajarlo a nuestro PC y subirlo de nuevo. Este material se guardará en un lugar diferente a los ficheros que subamos desde nuestro perfil.
Una red social basada en compartir archivos, un tema que siempre ha traído muchos dolores de cabeza y que continúa innovando, más vivo que nunca.
Si queréis enviar un archivo muy grande de vuestro ordenador a otras personas, y no queréis usar ningún disco virtual porque no deseáis que ese material se guarde permanente o temporalmente en ningún servidor de Internet, Sendoid puede seros de utilidad. Se trata de una aplicación que establece una conexión P2P entre dos o más ordenadores. Solo tenemos que elegir el archivo que queremos compartir y obtener el enlace que tendremos que divulgar a otras personas. Cuando alguien acceda a ese enlace, se establecerá una conexión entre los dos ordenadores, sin servidor guardando la información para servir de puente. Es importante recordar que una vez creada la conexión, no podrá desconectarse el ordenador hasta que no se complete la transferencia, evitando así la interrupción del envío. Existe la opción de usarlo directamente sin instalar nada, limitando a 1 giga por archivo, aunque también podéis instalar la versión de escritorio para eliminar ese límite. Una opción muy práctica y más sencilla de usar que el clásico Pando, que funciona con una filosofía semejante.