Hay una noticia que está generando revuelo en el mundo del streaming: Disney+, Hulu y ESPN+ están tomando medidas enérgicas contra el uso compartido de contraseñas. Este cambio, que sigue los pasos de Netflix, podría tener un impacto significativo tanto en los usuarios como en la industria. Vamos a adentrarnos en esta noticia, para entender mejor qué está sucediendo y cómo podría afectarnos.
Disney+ anunció que, a partir del 14 de marzo, restringirá el uso de cuentas a miembros del mismo hogar. Esto significa que el acceso a contenidos como películas de Pixar o series populares se limitará a la «residencia personal primaria» del suscriptor. Esta decisión sigue una tendencia iniciada por Netflix el año pasado, marcando un cambio significativo en la política de uso compartido de contraseñas en servicios de streaming.
Ya lo habían avisado en 2023, y algunos usuarios ya habían visto el mensaje amenazante, pero ahora hay fecha límite. Incluso habló de subir el precio a quien comparta cuentas.
Hulu, propiedad mayoritaria de Disney, está yendo un paso más allá. No solo limitará el uso compartido de cuentas, sino que también analizará los hábitos de visualización de los usuarios y podría incluso prohibir cuentas si detecta que se comparten contraseñas. Esta medida es más estricta que la de Netflix, que se basa principalmente en la dirección IP para identificar el uso fuera del hogar.
Esta medida plantea varias preguntas y preocupaciones. Por un lado, ¿cómo afectará a las familias dispersas geográficamente? ¿Y qué pasa con aquellos que viajan frecuentemente? Además, surge la cuestión de la privacidad: ¿hasta qué punto es aceptable que una empresa monitoree los hábitos de visualización de sus usuarios para hacer cumplir estas políticas?
Desde una perspectiva industrial, Disney busca aumentar sus números de suscriptores. A finales de 2023, reportaron más de 3,3 millones de suscriptores nuevos, en comparación con los 13.1 millones de nuevos usuarios de Netflix, pero cuentan ya con 150 millones de usuarios en total. Por otro lado, Disney y Hulu enfrentan un mayor índice de cancelaciones mensuales en comparación con Netflix, una tendencia conocida como «churn» (Tasa de cancelación de clientes). La estrategia de Disney parece ser una apuesta por estabilizar y aumentar su base de suscriptores a largo plazo.