¿Camino hacia la eficiencia o el monopolio?… desterrando cualquier atisbo de falta de compromiso o alejamiento de las directrices impuestas… así es como Google sigue avanzando en su objetivo de trasformarse en la puerta de entrada a la nube y es de esa forma que logra establecer quienes son los nuevos referentes, quienes ostentan la más eficiente clasificación y qué personas hay detrás de la calidad de la red.
En esta ocasión apostando por mantener bajo control a los spammer, Google pone en marcha una re-clasificación de los resultados de búsqueda obtenidos a través de su botón +1, mucho más que acción social.
Pero… veamos qué quiere decir esto y cuáles son sus efectos…
Google planea transformar su botón +1 en una herramienta que además de medir la influencia social, colabora activamente a través de la interacción de los usuarios en la consecución de una nueva clasificación, buscando específicamente, luchar contra el spam.
Esta acción no es del todo sorprendente, ya sabemos que la lucha contra la falta de compromiso y calidad por parte de Google es inexpugnable, pero… ¿qué novedades traerá esta herramienta en los motores de búsqueda y la clasificación actual? Y… lo que es aún más importante… ¿será esta la razón o Google en su búsqueda por el monopolio de la red podría crear una herramienta que le permitiera manipular los resultados de búsqueda?
Ha sido la propia empresa la que ha confirmado a wired que lo que se busca con esta funcionalidad del botón +1 es el aumento de la calidad y aunque la polémica sigue alimentándose y aún Google no ha logrado salvar su reputación ante los organismos reguladores en Estados Unidos y Europa en relación a las denuncias recibidas por los productos y servicios ofertados, la empresa defiende la búsqueda del aumento de la calidad de la red con el cronograma de sus acciones iniciado en el mes de marzo a través del nuevo algoritmo.
Lo que parece cierto si se analiza desde la perspectiva de la integración, es que Google circunscribe la clasificación y los resultados de búsqueda a las señales sociales que se establecen en Google + a través de la acción con el botón +1, lo que provoca más una desintegración al dejar a Twitter y Facebook fuera de la construcción de la clasificación.
En conclusión, la posibilidad de que la nueva funcionalidad del botón +1 suponga una exclusión del entramado social en su conjunto, se ve reflejado en la política que exige la exposición máxima de la persona en los perfiles de Google+ como condición excluyente para aquellos que nos cumplan con dichos preceptos.
Es seguro que asistiremos a la respuesta de los distintos entramados… y es de esperar que los spammer del mundo entero no encuentren transformar este ambicioso objetivo de Google en un retroceso de la calidad de la red.