De las cualidades de los nuevos líderes de opinión, podemos extraer la esencia misma del nuevo modelo productivo social.
Avanzamos hacia el establecimiento de un nuevo orden sustentado por los lazos afectivos, emocionales y personales. La solidaridad, la empatía, el compromiso, en definitiva, todos los valores que definen a la ética, se han transformado en un requisito indispensable para lograr consolidar una marca influyente.
Comenzamos a tomar conciencia de cuán indivisible es el marketing y la publicidad de la consolidación de un equipo de trabajo conformado por influencias individuales, luchando por un objetivo conjunto y con una sola voz.
Y tenemos cada vez más claro que prestar un adecuado servicio de atención al cliente, es un aspecto mucho más global que la medición de los tiempos de espera en un call center o en respuesta a un formulario.
El Community Manager es “atención al cliente” en su más pura esencia. Nexo conductor entre el mundo real y el virtual y elemento que equilibra las necesidades e intereses de los clientes internos y externos.
De la figura del Community manager podemos obtener las 5 cualidades que nos exige desarrollar el Social Media.
Pasión, sin ella es imposible emprender
No nos engañemos, hemos pasado de la comodidad de nuestras oficinas o el sueño utópico de terminar la carrera y acceder a un despacho, a una realidad en la que el consumo de los recursos necesarios para vivir, está supeditado a la capacidad que tengamos nosotros de generar lo que necesitan otras personas.
Hemos transitado vertiginosamente, del individualismo y la impunidad con la que subíamos peldaños a golpe de letras del crédito que se acumulaban sin control, al aterrizaje con la más cruda realidad: la asociación de personas, es lo único que nos salvará de la quema. Sí, un Community Manager debe ser apasionado y un emprendedor, también.
Experiencia, mucho más que un título
En términos generales, cuando hablamos de experiencia siempre lo vinculamos al aspecto profesional. Sin embargo, no nos olvidemos de la naturaleza social del nuevo modelo y de su necesaria vinculación con las emociones.
Las experiencias de vida, las veces que se haya reinventado, su capacidad para perseguir objetivos, su reputación intachable, son aspectos que un Community Manager debe entregar y, sin duda, debemos hacerlos propios si buscamos consolidar nuestra marca personal o de empresa.
Iniciativa, recursos, disponibilidad
En el momento actual, enfrentar el “emprendimiento” como forma de vida es un proceso complejo. Altas dosis de iniciativa, recursos ajenos al dinero y disponibilidad permanente, son indispensables si queremos llegar a un universo cada vez mayor de personas interesadas en lo que hacemos.
Los Community Manager son profesionales que cuentan con la capacidad para encontrar respuestas en su target, logrando más valor agregado para la marca, gracias a su incorporación como elementos activos de la promoción. ¡Y esta es una muy buena estrategia!
El emprendimiento no tiene horarios
Otro gran desafío… si es que nadie dijo que fuera fácil… Para un Community Manager que se debe a sus marcas y a su propia influencia, simultanear el mundo real con su “Avatar”, es una forma de vida. De la flexibilidad, disponibilidad y compromiso, depende la fidelización de los clientes y el crecimiento de la marca.
Personalidad y liderazgo
Los Community Manager son profesionales influyentes, empáticos, comprometidos y con capacidad para gestionar adecuadamente las crisis que, son inevitables.
Las relaciones sociales son mucho más sencillas de lo que generalmente las proyectamos. Todo es una cuestión de elección. Ante un cliente malhumorado tenemos la opción de ponernos a la defensiva ”“mostrando grandes debilidades- o reconocer responsablemente el error. De la decisión que tomemos dependerá la reacción del otro. Si entregamos confianza, empatía y compromiso, es lo que finalmente definirá a nuestra marca.
La idea es avanzar, no cerrarnos puertas. Grandes lecciones las que nos dejan las 5 cualidades de un buen Community manager