Antes de subir una fotografía a Internet es necesario comprimirla, hacer que ocupe menos sin perder mucha calidad, para que los lectores no tengan que esperar demasiado tiempo hasta que la descarga de dicha imagen finalice.
Hay muchas formas de comprimir adecuadamente una imagen. Podemos exportarla con un porcentaje específico de pérdida en nuestro editor favorito (Photoshop, Gimp u otros), podemos usar un sistema de captura de pantalla que incluya exportación automática con compresión y pérdida, como WinSnap, por ejemplo, o podemos usar alguna de las muchas opciones web que comprimen imágenes que subamos desde nuestro ordenador.
En esta tercera categoría tenemos a TinyPNG, un clásico en el sector, capaz de comprimir fotos en diferentes formatos para obtener niveles de compresión realmente buenos, sin perder calidad y reduciendo el tamaño del archivo de forma sorprendente.
Ahora tenemos una nueva opción, y en las pruebas que hemos realizado, es mejor aún que TinyPNG, aunque la compresión depende mucho de los colores y estrcutura en general de la imagen enviada.
Se trata de Compress.studio, una web que comprime los archivos que enviemos y los guarda de forma descentralizada usando tecnología blockchain. Podemos hacer la prueba sin necesidad de registro y ver en la pantalla el antes y el después de la compresión, para que verifiquemos cómo no hay pérdida perceptible de calidad. En el caso de que nos identifiquemos con la cuenta de Blockstack, podremos alojar las fotos finales de forma gratuita en Internet, en la red blockchain, sin depender de un servidor central.
En la captura superior podéis ver cómo ha conseguido comprimir una imagen un 31%, imagen que TinyPNG solo redujo un 24%. Por otro lado es importante recordar que usando un editor de fotografía y exportando en JPEG con 75% de calidad se podría reducir mucho más, aunque esa última solución no está al alcance de todos.