Sabemos muy poco del Universo en el que vivimos, y muchos de las cosas que sabemos en realidad son teorías que esperan en el cajón de «cosas que aún deben demostrarse».
Aún así, debemos dar gracias por haber nacido en una época en la que hay tantos estudios, tanta tecnología y tanta curiosidad en nuestras cabezas. Solo así noticias como esta que os presento hoy despiertan nuestra imaginación y calientan nuestras ganas de saber más.
Uno de estos conceptos «complicados» es la materia oscura, una entidad invisible que no interactúa con la luz ni con el campo electromagnético, pero que ejerce una fuerza gravitacional. Tradicionalmente, se cree que constituye la mayoría del universo (bueno, siendo estrictos, 23% de materia oscura, un 72% de energía oscura y un 5% de materia ordinaria), desempeñando un papel crucial en la estructura y formación de galaxias. Sin embargo, una teoría reciente propuesta por Rajendra Gupta, profesor de física de la Universidad de Ottawa, está desafiando nuestra comprensión establecida, sugiriendo que el universo podría ser el doble de antiguo de lo que se pensaba y, más sorprendente aún, que la materia oscura podría no existir en absoluto.
¿Qué es la materia oscura y por qué es importante?
La materia oscura se propuso por primera vez en la década de 1930 por el astrónomo Fritz Zwicky. Observó que las galaxias en los cúmulos se movían de manera que solo podía explicarse si había mucha más masa en el cúmulo de lo que se podía ver. Desde entonces, la evidencia de la materia oscura ha crecido, especialmente a través de la observación de las curvas de rotación de las galaxias, que muestran que deben contener mucha más masa de la que podemos detectar directamente.
La materia oscura es importante porque ayuda a explicar cómo las galaxias se mantienen unidas y cómo se formó la estructura a gran escala del universo después del Big Bang. Sin ella, nuestras teorías actuales sobre el universo simplemente no funcionarían.
La controversia de la nueva teoría
La propuesta de Gupta sugiere una perspectiva radicalmente diferente. Argumenta que no necesitamos invocar la existencia de la materia oscura para explicar las observaciones cosmológicas. En su lugar, propone que el universo es mucho más antiguo de lo que pensábamos, con unos 26.7 mil millones de años, y que la expansión acelerada del universo se puede explicar por la debilitación de las fuerzas de la naturaleza a medida que este se expande.
Para apoyar su modelo, Gupta retoma la hipótesis de la «luz cansada» de Zwicky, combinándola con una nueva «constante de acoplamiento covariante». Este enfoque sugiere que, en lugar de una constante cosmológica que explica la energía oscura y la expansión acelerada del universo, podríamos estar observando una disminución en la fuerza de las interacciones fundamentales.
Implicaciones y desafíos
La teoría de Gupta plantea preguntas significativas sobre nuestro entendimiento del cosmos. Si las fuerzas de la naturaleza disminuyen con el tiempo, esto podría explicar la expansión del universo sin necesidad de energía oscura ni materia oscura. Esta idea es intrigante y desafiante, ya que pone a prueba los límites de nuestras teorías actuales y nos obliga a mirar el universo bajo una luz completamente diferente.
Sin embargo, como con cualquier teoría que desafíe el consenso científico, Gupta enfrentará escrutinio y se requerirán pruebas extraordinarias. Este tipo de debate y revisión es esencial en la ciencia, ya que nos empuja hacia una comprensión más profunda y precisa del universo. La historia no acaba aquí, por lo que estaremos atentos para ver cómo se discute el tema.