Las transmisiones en vivo son parte de los grandes elementos protagonistas de estos tiempos de reinvención para muchos personajes públicos, marcas e individuales.
En el caso de Facebook o YouTube, por citar algunas de las plataformas más comunes para llevarlas a cabo, las opciones de personalización son muchas, pues se puede emitir a través de software de terceros que cuenten con la capacidad de añadir gráficos, textos e incluso, manejar más de una cámara. Sin embargo, en Instagram el mecanismo por defecto para transmitir contempla únicamente el uso de su app oficial.
Si quieres darle un aspecto más acabado y profesional a tu transmisión en vivo a través de Instagram, presta atención a la siguiente herramienta, la cual te permitirá gestionar tus directos con las mismas capacidades disponibles para otras plataformas.
Se trata de Yellow Duck, una sencilla aplicación que puedes instalar en tu ordenador Windows o Mac, la cual te revela las credenciales para transmitir a través del mecanismo RTMP. De esta forma, podrás usar codificadores como Open Broadcaster Studio (OBS), Xsplit, Wirecast o cualquier otro de tu preferencia.
El funcionamiento de esta aplicación es sencillo. Una vez instalada, basta con iniciar sesión con tu cuenta de Instagram dentro de Yellow Duck, para que posteriormente la misma presente en pantalla la URL del servidor RTMP a configurar y la clave de transmisión. Son estos dos datos los necesarios para indicar en tu codificador (software de transmisión). Más de diez aplicaciones de este tipo son las que el equipo de esta herramienta han podido probar con éxito, señalando en su centro de ayuda las indicaciones necesarias para configurar cada uno de estos ejemplares.
Pantalla principal de Yellow Duck, con los datos que genera para configurar la transmisión.
Y eso es todo, al menos en lo que a esta aplicación respecta. Una vez realizada la conexión, tu software estará habilitado para transmitir directamente hacia Instagram.
Una de las ventajas que este mecanismo tiene es la posibilidad de hacer switch entre más de una cámara conectada al ordenador. Puedes, por ejemplo, usar la webcam integrada de tu laptop (en caso de contar con ella) y de forma accesoria, vincular tu smartphone como segunda cámara, para así hacer juego intercalando dos ángulos distintos de visión.
Puedes también, gracias a las bondades de tu codificador, agregar una fuente de video alternativa, como un archivo almacenado en tu ordenador o aquello que visualices desde la pantalla de tu equipo. Igualmente, puedes agregar una fuente de audio externa, como lo que registre la línea de entrada de tu tarjeta de sonido o aquello que se emita directamente desde tu ordenador.
Adicionalmente, podrás sobreponer gráficos y textos a tu pantalla y configurar transiciones entre escenas. Las posibilidades de personalización son muchas, pero siempre dependen de las capacidades del software usado para controlar la transmisión.
OBS Studio, software citado como ejemplo para usar en tus transmisiones junto a Yellow Duck
En caso de no tener una aplicación predilecta para este fin, recomendamos dar los primeros pasos usando OBS, una versátil alternativa gratuita y de código abierto. Si quieres saber más, puedes revisar su documentación, para conocer su interfaz y cómo comenzar a usarla.
Si tienes un show que con regularidad emites a través de Instagram, si realizas gameplays, si tienes un podcast o cualquier otra iniciativa que utilice como recurso una transmisión en directo para dotarla de más exposición, esta alternativa vale la pena ser revisada.
Yellow Duck es una aplicación totalmente gratuita. En su sitio web anuncian que no almacenan datos de tu cuenta, por lo que tu información personal, y sobre todo, las credenciales de acceso a tu cuenta, permanecerán bajo resguardo.
Para acceder a la descarga de Yellow Duck y conocer más información sobre esta aplicación, puedes visitar su sitio web.