Producto de un trabajo colaborativo entre un equipo de investigación de la Universidad de Cambridge y Beko, fabricante de electrodomésticos, fue creado un “robot chef”, capaz de probar alimentos en diferentes etapas del proceso de masticación, para evaluar si están lo suficientemente sazonados.
La idea tras el desarrollo de este robot es la obtención de un modelo replicable en el desarrollo de futuros instrumentos de cocina automatizados o semiautomatizados, capaces de dominar de mejor forma el proceso de preparación de alimentos.