¿Alguien había pensado por un solo momento que, las emociones, el engagement, la experiencia, el impacto, la inclusión del consumidor en los procesos creativos y el auge constante y dinámico del interés por el fenómeno social, desplazaría la necesidad de conocer los secretos de la neurociencia y aplicarnos a nuestras acciones?
Es de esperar que no, porque no es un tema menor pensar que la creatividad ”“ lo mas buscado y perseguido en el momento actual por las sociedades- surge de la ruptura, de la crisis, del dolor, de la combinación de sucesos y experiencias.
Las personas creativas que lo son de forma innata, poseen una capacidad única para establecer relaciones, patrones, ideas, que nacen de la espontaneidad. Necesitan momentos de abstracción profunda y también ciclos de acción mental centrada en análisis y el razonamiento, combinado con la visualización y conexión espontánea. Aunque presentan serios problemas para seguir planificaciones, minimizando así la eficiencia de su don.
También existen las personas que no poseen de forma innata la creatividad y que conforman un hábito para su desarrollo a partir de la constancia y la perseverancia que subyace en el proceso de formación y asimilación constante de información al que se enfrentan cada día.
¿Todos tenemos la posibilidad de innovar y ser creativos? Continúa leyendo «Despertando la creatividad, 8 acciones indispensables»