El año 2016 será recordado por Samsung como fatídico, sobre todo si tenemos en cuenta el desastre provocado por el Note 7. Después de que la compañía lanzase al mercado su buque insignia, Samsung se vio obligada a retirar del mercado todas las unidades del dispositivo tras descubrirse que algunos móviles estaban explotando por causas desconocidas. Como ya os adelantábamos hace unos días, la causa de las explosiones se haría pública a lo largo del mes de enero. A pesar de que todavía quedan unos días para la publicación del comunicado oficial por parte de Samsung, fuentes cercanas a la compañía han desvelado a Reuters la causa del problema.
A pesar de se sospechaba que el problema estaba en las baterías de los dispositivos, diferentes analistas afirmaban también que el diseño del terminal podría ser el culpable del fallo al no dejar suficiente espacio a las baterías. Todo parece indicar que finalmente Samsung habría llegado a la conclusión de que el problema está, de hecho, en las baterías empleadas en el smartphone. A pesar de que aún tenemos que esperar la confirmación oficial, se trata de un anuncio preocupante, sobre todo si tenemos en cuenta que las baterías podrían haber sido fabricadas por dos compañías distintas.