Buddy.ai es una aplicación que combina inteligencia artificial y entretenimiento para enseñar inglés a niños de todo el mundo. En un mercado donde el aprendizaje de idiomas es cada vez más accesible gracias a la tecnología, Buddy.ai destaca al usar un personaje animado y divertido que interactúa directamente con los pequeños estudiantes, convirtiendo el aprendizaje en una experiencia similar a un juego. Creada por Ivan Crewkov, esta aplicación surge de una necesidad personal: Crewkov quería ayudar a su hija a aprender inglés de forma efectiva, sin los problemas de tutorías impersonales que había experimentado anteriormente.
el nacimiento de Buddy.ai: de Siberia a Silicon Valley
En 2014, Crewkov trasladó a su familia de Siberia a Estados Unidos para lanzar su primer proyecto tecnológico, un altavoz inteligente, que fue rápidamente eclipsado por el lanzamiento de Amazon Echo. Sin embargo, este revés no fue en vano, ya que la experiencia de ayudar a su hija a adaptarse a un entorno de habla inglesa inspiró su siguiente startup. Al ver las limitaciones de los tutores en línea, surgió la idea de crear un asistente de inteligencia artificial capaz de ofrecer una educación más interactiva y accesible.
¿cómo funciona Buddy.ai?
Buddy.ai es una aplicación de suscripción que los usuarios pueden descargar en sus dispositivos móviles. A través de un personaje animado, los niños interactúan con el tutor virtual en inglés, participando en diálogos y juegos que facilitan la práctica del idioma. La tecnología de Buddy.ai ha logrado entender y adaptarse a acentos y pronunciaciones específicas de diferentes países, lo que significa que un niño brasileño o saudí puede aprender inglés, adaptado a sus propias necesidades lingüísticas y de pronunciación.
Esta capacidad de adaptación no fue fácil de lograr. Crewkov y su equipo tuvieron que entrenar al modelo para entender no solo voces humanas, sino también las voces de niños pequeños en sus primeros intentos de hablar inglés. La aplicación, que actualmente cuenta con más de 55 millones de descargas y trabaja con 22 millones de estudiantes al año, se ha convertido en una herramienta popular tanto en hogares como en algunas escuelas de países como Brasil.
superando desafíos legales y técnicos
Para una empresa enfocada en educar a niños, cumplir con leyes de privacidad infantil como COPA (Children’s Online Privacy Act) fue un reto considerable. Además, el desarrollo de la aplicación llevó mucho más tiempo de lo previsto, ya que el equipo subestimó la complejidad de adaptar la inteligencia artificial para entender a niños de diferentes nacionalidades y lenguas maternas.
La experiencia de Crewkov al recaudar fondos también tuvo sus altibajos, a pesar del creciente interés en la inteligencia artificial. Con perseverancia, lograron cerrar una ronda de financiación de 11 millones de dólares, liderada por BITKRAFT Ventures, un fondo especializado en tecnología de juegos. Este fondo fue ideal para Buddy.ai, ya que muchos niños descargan la aplicación principalmente por el aspecto lúdico del personaje de Buddy, quien les enseña de manera entretenida y cercana.
el futuro de Buddy.ai: nuevos idiomas y alianzas con escuelas
Con los fondos obtenidos, Buddy.ai planea seguir expandiéndose. Uno de sus principales objetivos es incluir más idiomas y fortalecer las relaciones con instituciones educativas. Crewkov cree firmemente en un futuro donde los tutores de inteligencia artificial trabajen junto con los profesores, ayudando a cubrir la falta de personal docente en todo el mundo y ofreciendo práctica diaria del idioma de manera accesible y atractiva para los niños.
Buddy.ai no es el único en este campo: otras startups como Univerbal y Loora también exploran el uso de personajes de inteligencia artificial para la práctica de idiomas. Sin embargo, Buddy.ai se distingue al enfocarse en la enseñanza del inglés específicamente para niños, combinando tecnología avanzada con un enfoque de aprendizaje que es tanto educativo como divertido.