Un nuevo papel para la energía nuclear: así funciona el primer reactor que produce 200 toneladas de hidrógeno al día

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el primer reactor que produce 200 toneladas de hidrógeno al día

En Corvallis, Oregón, la empresa NuScale Power ha presentado un hito tecnológico que podría transformar la forma en que producimos energía y combustibles limpios. Se trata del primer simulador completamente funcional que integra un reactor nuclear modular (SMR) con un sistema de producción de hidrógeno, capaz de generar hasta 200 toneladas diarias de este gas sin emisiones de carbono. No es un prototipo especulativo, sino una herramienta de entrenamiento y validación operativa que ya está en marcha.

Qué es un reactor SMR y por qué importa

Los Small Modular Reactors (SMRs) son reactores nucleares compactos, diseñados para ser más seguros, flexibles y escalables que los reactores tradicionales. Ocupan menos espacio, pueden construirse más rápido y operan con menor coste. En este caso, NuScale ha adaptado su SMR para que trabaje no solo generando electricidad, sino también produciendo hidrógeno a gran escala mediante un sistema de electrólisis de alta temperatura.

Este tipo de electrólisis requiere una fuente térmica constante y potente, algo que los SMRs pueden proporcionar de forma estable, a diferencia de las energías renovables intermitentes. Aquí es donde entra la ventaja competitiva de esta tecnología nuclear.

El corazón de la tecnología: las celdas de combustible reversibles

El sistema utiliza celdas de combustible reversibles de óxido sólido (RSOFCs), que tienen la capacidad de operar en dos sentidos: pueden producir electricidad a partir de hidrógeno, o bien generar hidrógeno a partir de electricidad y vapor de agua. Esto no solo permite una operación eficiente y flexible, sino que también genera agua limpia como subproducto, algo especialmente valioso en regiones con escasez hídrica.

Estas celdas funcionan como un motor reversible: lo mismo pueden impulsar un vehículo que recargar su batería, según las necesidades energéticas del momento. Esta dualidad las convierte en piezas clave para un sistema energético más resiliente y versátil.

Más que un simulador: una plataforma educativa y operativa

El simulador instalado en las oficinas de NuScale no es solo una maqueta digital. Reproduce en tiempo real las condiciones térmicas, el flujo de procesos y la interacción entre el reactor y el sistema de hidrógeno. Esto permite no solo validar el funcionamiento técnico de la propuesta, sino también formar operadores especializados.

En un futuro cercano, esta herramienta estará disponible para universidades e instituciones industriales, con el objetivo de crear una nueva generación de profesionales capaces de gestionar estas plataformas energéticas integradas.

Una solución modular y escalable

Uno de los puntos fuertes del enfoque de NuScale es la modularidad. El sistema está diseñado para ampliarse según la demanda: pueden funcionar varios módulos en paralelo, tanto para electricidad como para agua y combustibles. Por ejemplo, con una configuración de 12 módulos, se podrían abastecer a 2,3 millones de personas con agua limpia y suministrar energía a 400.000 hogares, todo sin emitir gases de efecto invernadero.

Esto no solo mejora la eficiencia, sino que también permite llevar la tecnología a zonas remotas o con infraestructuras limitadas, ofreciendo una solución energética descentralizada.

Aprovechando hasta los residuos

Otro avance relevante es el aprovechamiento de la salmuera generada en el proceso de desalinización, que tradicionalmente se considera un residuo. En colaboración con el Laboratorio Nacional del Pacífico Noroeste, NuScale ha desarrollado un proceso hidrotermal que convierte esta salmuera en materia prima para producir hidrógeno, cerrando el ciclo del agua y reduciendo residuos.

Este enfoque de «economía circular nuclear» convierte lo que antes era un problema ambiental en una oportunidad para generar más energía limpia.

Un paso firme hacia la sostenibilidad industrial

El proyecto de NuScale no busca reemplazar otras fuentes de energía limpia, sino complementarlas y dar solución a problemas complejos como la descarbonización industrial, la escasez de agua y la producción de combustibles sin emisiones. Al integrar producción eléctrica, hidrógeno, agua limpia y capacitación de personal en una sola plataforma, esta iniciativa representa una apuesta clara por un futuro energético modular, resiliente y sostenible.