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Ser educado con ChatGPT sí puede afectar al resultado

Interactuar con IA

Desde hace meses muchos profesionales hemos insistido en cuidar la forma como interactuamos con las máquinas. La educación en las interacciones con ChatGPT, aunque no es un requisito técnico para la obtención de respuestas, tiene su importancia desde una perspectiva de usabilidad y práctica. La cortesía en las peticiones no afecta mucho a la calidad técnica o al contenido de las respuestas generadas por la IA, pero sí puede influir en la experiencia general del usuario y puede influir en el contenido a medio y largo plazo dentro de un mismo chat.

A continuación, detallo algunos puntos clave sobre este tema:

Aunque la educación en sí misma no altera la capacidad técnica de ChatGPT para generar respuestas, tenemos que recordar que nosotros sí cambiamos dependiendo de cómo pedimos las cosas, y la forma de pedir es la clave de la ingeniería de prompts.

Veamos algunos casos en los que la emoción o la educación a la hora de pedir algo sí podría afectar a los resultados:

En todos estos casos, el cambio en el resultado no se debe a que el modelo tenga emociones o preferencias personales, sino a su diseño para procesar y responder a variaciones en el lenguaje y el contexto de manera coherente. Es importante recordar que, aunque el tono puede influir en la respuesta, ChatGPT se esfuerza por mantener la objetividad y la precisión en sus respuestas, independientemente del tono de la pregunta.