Cómo editar tu primer vídeo de YouTube: Una guía para novatos

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chica editando video

Al enfrentarte a la edición de tu primer video de YouTube, es normal sentir un cosquilleo de nerviosismo. ¿Por dónde empezar? ¿Qué herramientas usar? Hoy, os comparto una ruta sencilla para que este proceso sea fluida y eficaz, incluso para aquellos que nunca han estado detrás de una línea de tiempo de edición.

Aún así, es importante tener en cuenta que no es necesario editar todos los vídeos, la edición tiene que tener una finalidad, ya que, como siempre, lo que más importa es el contenido.

1 – Preparación de archivos

Lo primero es crear un entorno de trabajo ordenado. Al igual que en una cocina, donde cada ingrediente tiene su lugar, vuestros clips y tomas deben estar meticulosamente archivados en carpetas. Esto no solo facilita el acceso durante la edición sino que evita dolores de cabeza a largo plazo. Poned las tomas, los archivos de audio, las capturas y fotografías, todo perfectamente clasificado.

2 – Importa todo el material

El siguiente paso es tan fundamental como ponerle las ruedas a un coche. Abrir vuestro programa de edición y arrastrar allí todas las tomas. Ya sea iMovie, Final Cut Pro o cualquier otro software, la técnica es universal. Es mejor pecar por exceso que pod defecto. Importa todo, y luego arrastra lo que vayas usando, así no perderás tiempo en volver a importar desde el disco duro el material que vayas necesitando.

3 – Corta lo superfluo

Ahora viene la parte creativa: seleccionar lo mejor de tu material. Imagina que esculpes una estatua; elimina todo lo que no contribuye a la forma deseada de tu obra. Esto incluye errores, pausas largas y cualquier otro fragmento que no aporte valor al relato final. A veces hay algo divertido que puedes dejar para el final, en «tomas falsas», pero no hagas más largo de lo necesario un vídeo, ya que el tiempo de los seguidores es sagrado.

4 – Analiza el resultado con ojos de espectador

Una vez que tengas una versión preliminar, mírala con ojos de espectador. Pregúntate: ¿Es ágil? ¿Repetitiva? ¿Entretiene? Ser crítico en este punto te distinguirá de muchos creadores de contenido que suben sus trabajos sin este análisis.

5 – El gancho

El inicio de tu video es tu apretón de manos con la audiencia. Filma un gancho convincente, algo que prometa el valor de lo que van a ver y los motive a quedarse. ¿Un consejo? Elige los momentos más impactantes de tu material como aperitivo visual.

6 – El B-roll

El B-roll es como la salsa que da sabor a un plato; usa imágenes adicionales que complementen tus palabras y enriquezcan la experiencia visual, manteniendo el interés del espectador a lo largo de todo el video.

El B-roll es un término que proviene del mundo de la cinematografía y la producción audiovisual, utilizado para referirse al material de video que se graba adicionalmente al metraje principal, conocido como A-roll. Este A-roll suele consistir en las grabaciones principales de cualquier producción, como pueden ser las tomas directas de un presentador hablando a cámara o la acción principal de una escena.

Por otro lado, el B-roll incluye todas aquellas tomas secundarias que se utilizan para enriquecer la narrativa visual, como pueden ser imágenes de contexto, detalles, planos de reacción, entre otros. Por ejemplo, si estamos viendo un documental sobre la vida en una ciudad y el narrador describe el tráfico, el B-roll podría mostrar coches moviéndose por las calles, gente caminando por las aceras, semáforos en cambio, etc.

La función del B-roll es doble: por un lado, ayuda a crear una experiencia más rica y visualmente dinámica para el espectador; por otro lado, ofrece flexibilidad durante la edición, permitiendo cortes más naturales entre tomas y ayudando a cubrir errores o problemas que puedan surgir en el A-roll.

7 – Los efectos

Los efectos y la música son el aderezo final. No obstante, es crucial no sobrecargar tu creación. Un buen plato no necesita exceso de condimentos y tu video tampoco.

8 – La música

Usar música de fuentes confiables, asegúrate que no tendrás problemas de derechos de autor y mantendrás la posibilidad de monetizar tu contenido.

9 – Corrección de color

La corrección de color puede ser tu gran aliada si tu material lo requiere. Si te sientes abrumado por esta etapa, no temas omitirla. Con el tiempo, podrás jugar más con esta herramienta.

10 – La revisión final

Antes de exportar tu creación al mundo, revísala meticulosamente. Asegúrate de que no haya errores, que el sonido sea el adecuado y que la ortografía esté impecable.

Por último, la exportación de tu video debe hacerse con los ajustes óptimos. Investigar un poco sobre las mejores configuraciones para YouTube te garantizará que tu video luzca exactamente como lo imaginaste.

No es necesario que sea revolucionario; lo importante es que sea auténtico y refleje tu esencia como creador. La tecnología está para facilitarnos la vida, y en el mundo del contenido digital, saber cómo contar nuestras historias de manera efectiva es una habilidad invaluable.