El desarrollo de baterías eficientes es uno de los desafíos más apremiantes en la transición hacia una movilidad más sostenible. En este contexto, la inteligencia artificial emerge como una herramienta que podría acelerar significativamente la investigación y producción de baterías de alto rendimiento.
El número de moléculas comercialmente disponibles es asombroso, llegando a los miles de millones. Cuando se trata de combinarlas para crear materiales de electrolitos en baterías, las posibilidades son prácticamente infinitas. Este escenario complica enormemente la tarea de encontrar la combinación óptima.
La startup Aionics se centra en resolver este problema. Su objetivo es utilizar herramientas de inteligencia artificial para acelerar la investigación y desarrollo de baterías más eficientes, especialmente en el ámbito de los electrolitos.
Aionics emplea mecánica cuántica acelerada por IA para analizar una base de datos de miles de millones de moléculas conocidas. Esto permite a la empresa considerar hasta 10,000 candidatos moleculares cada segundo, optimizando el proceso de selección.
La empresa ha incorporado IA generativa en su enfoque. Estos modelos de IA están entrenados en datos de materiales de baterías existentes y pueden diseñar nuevas moléculas que se ajusten a aplicaciones específicas, ampliando así el espectro de posibilidades.
Aionics ha recaudado 3,5 millones de euros hasta la fecha y ha establecido colaboraciones con empresas como Cellforce, la filial de fabricación de baterías de Porsche, y Form Energy.
La tecnología de Aionics no se limita a las baterías. También se está explorando su uso en la producción de cemento con cero emisiones, lo que podría tener implicaciones significativas en la industria de la construcción.
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