El avión de la NASA que desvela los secretos de los rayos gamma en tormentas

Publicado el

nasa

La naturaleza siempre ha sido una fuente inagotable de misterios, y las tormentas eléctricas no son la excepción. Un grupo de investigadores ha decidido enfrentarse a estos fenómenos de frente, literalmente, al volar dentro de ellos con un avión especial de la NASA.

El equipo detrás de la misión

Un equipo internacional de expertos, que incluye a la Universidad de Bergen, el Laboratorio de Investigación Naval de EE. UU. y tres centros de la NASA, ha unido fuerzas para llevar a cabo esta audaz misión. Durante un mes, realizaron 60 horas de vuelos, sumergiéndose en el corazón de las tormentas.

El avión ER-2: Una maravilla de la ingeniería

El ER-2, el avión utilizado en esta misión, es una verdadera joya de la tecnología aeroespacial. Capaz de volar casi al borde de la atmósfera terrestre, este avión puede alcanzar altitudes que superan con creces a las de los aviones comerciales. Para ponerlo en perspectiva, mientras que un avión comercial vuela a unos 10,668 metros, el ER-2 ha registrado vuelos de hasta 20,100 metros.

Rayos gamma: Más allá del relámpago

Cuando pensamos en tormentas eléctricas, lo primero que nos viene a la mente es el relámpago. Sin embargo, estas tormentas también son fuentes de rayos gamma, una radiación de alta energía. Estos rayos se generan debido a los intensos movimientos de viento y agua en la tormenta. El objetivo principal de esta misión es comprender cómo se forman estos rayos y su relación con otros fenómenos atmosféricos.

ALOFT: La misión que busca respuestas

La misión, denominada ALOFT, se llevó a cabo en Tampa, Florida. Durante la misma, el ER-2 estuvo equipado con instrumentación de vanguardia, incluido un detector de rayos gamma de la Universidad de Bergen. Este detector no solo recopiló datos, sino que también los transmitió en tiempo real, lo que permitió a los investigadores hacer ajustes en tiempo real.

Contribuciones adicionales

Los Centros de Vuelo Espacial Marshall y Goddard de la NASA no se quedaron atrás y aportaron instrumentos que capturan otras longitudes de onda emitidas por las nubes. Uno de estos instrumentos, el FEGS, es capaz de detectar radiación cercana al infrarrojo y ultravioleta de los relámpagos. Esta capacidad es esencial para anticipar la intensificación de las tormentas y garantizar la seguridad pública.

Más información en nasa.gov

Comparte en: