A estas alturas ya no sorprende que haya características que lleguen inicialmente de forma gratuita para todos los usuarios en muchas plataformas de Internet para que, tiempo más tarde, pasen a convertirse en características exclusivas para suscriptores de pago.
Pero el caso más llamativo lo están viendo un reducido grupo de usuarios en YouTube en estas últimas semanas. Y es que la plataforma social de vídeos de Google está probando el hecho de que vídeos a resolución 4K, y superiores en caso de estar disponibles, pasen a ser exclusivamente para suscriptores de YouTube Premium.
Buscando ahorrar costes y aumentar suscriptores
YouTube se adelantó en su momento en la apuesta por los vídeos a 4K cuando era una resolución prácticamente desconocida entre el gran público, trayendo el soporte en el año 2010, años antes de que llegase el año 2014 como el año del despegue de su popularidad.
Además, el soporte para vídeos a 8K se encuentra presente desde su llegada en 2015.
El pequeño grupo de usuarios que participan en la prueba actual verán, desde ahora, que para ver un vídeo a 4K, o superior si estuviera disponible, deberán convertirse en suscriptores de YouTube Premium. En el selector de resoluciones verán para estas resoluciones una etiqueta que apunta a la necesidad de ser suscriptor de YouTube Premium.
Google pretenderá así ofrecer un beneficio adicional para los suscriptores de YouTube Premium a costa de arrebatarles al resto de usuarios algo que vienen pudiendo hacer desde hace bastantes años.
En función de los resultados, Google tomará una medida u otra, pero los usuarios que se han convertido en participantes de esta prueba han compartido sus impresiones en plataformas sociales como Twitter o Reddit (1,2).
Esta prueba llega después de otra muy reciente, en la que se ofrecía hasta 10 anuncios seguidos, sin posibilidad de omitirlos, antes de ver el contenido para aquellos que no sean suscriptores de YouTube Premium.
Parece que Google se prepara para afrontar una etapa en la que tanto la misma como otras tecnológicas están reduciendo gastos mediante una serie de reorganizaciones por la que, entre otras cosas, también dará con el cierre de Stadia, la plataforma de transmisión de juegos desde la nube, como pudimos conocer la semana pasada.