Todos somos conscientes de los avances que ha traído la tecnología en ámbitos como ciencia, salud, educación, seguridad, deporte, entretenimiento.
Así también, en la rama textil se ha podido evidenciar como la tecnología ha permitido crear tejidos más resistentes y duraderos, dotándolos también de propiedades que les permiten disipar mejor el calor y el sudor del cuerpo.
Así también, la implementación de tejidos inteligentes ha facilitado la manipulación de materiales flexibles como el níquel, el cobre o la plata para dar forma a prendas que se adapten al cuerpo y no requieran plancharse.
Hace poco se dio a conocer el desarrollo de un tejido por parte de un grupo de científicos al cual dotaron con capacidades que le hacen estirable y resistente al agua. Sin embargo, lo que hace notable a este tejido es su capacidad de transformar la energía procedente de los movimientos corporales en electricidad.
El elemento clave para que esto sea posible es un polímero que forma parte de la estructura del tejido y que se activa al experimentar tensión mecánica para convertir esta en energía eléctrica.
Así también, se encuentra presente el spandex haciendo de capa base, el cual fue combinado con un material que asemeja al caucho, obteniendo al final una pieza dotada con cualidades que la hacen impermeable, flexible y fuerte.
Durante la realización de un experimento donde el tejido fue sometido a prueba, el equipo de la Universidad Tecnológica Nanyang (NTU) de Singapur, al mando de Lee Pooi See pudo demostrar como al golpear suavemente una porción de 3 x 4 centímetros de este tejido fue posible generar la energía suficiente para activar 100 leds.
Así también, pudo comprobarse que tras someter al tejido a los procesos de lavado y planchado este mantenía intacta sus propiedades, en especial su rendimiento, el cual no decayó, permitiéndole así mantenerse estable para producir energía eléctrica durante cinco meses, incluso estando arrugado.
De esta manera se demuestra el potencial que este tejido posee para ser usado como material textil dentro de proyectos que involucren fuentes de energía generadas de forma orgánica.
Con base en estos resultados el equipo se muestra esperanzado de que en un futuro cercano su tejido sea implementado en la fabricación de camisetas o incorporado en las suelas de zapatos con el propósito de capturar la energía del cuerpo para procesarla y destinarla a la alimentación de dispositivos móviles.