Actualmente, uno de los mayores misterios de la ciencia actual ha sido la energía oscura, de la cual lo único que se sabe hasta ahora es que constituye una entidad invisible que abarca todo el universo y que ocasiona la forma y separación entre galaxias.
Una de las definiciones más sencillas respecto a este elemento es que se trata de una «constante cosmológica» resultante de la energía presente en el vacío del propio espacio.
No obstante, muchos expertos en física consideran que esta explicación no resulta convincente por carecer de una descripción que satisfaga las interrogantes generadas en torno a la naturaleza de la energía oscura, así como de la tasa actual de expansión del universo.
Es aquí donde el Estudio Espectroscópico de la Oscilación de Bariones (eBOSS) llega para ofrecer respuestas a estas dudas a través de un trabajo compuesto por 23 publicaciones, algunas de las cuales están siendo estudiadas por expertos en física, logrando así el mayor mapa cosmológico tridimensional jamás creado.
Hasta el momento el único método usado para detectar la presencia de la energía oscura ha sido a través de las observaciones del universo distante, las cuales han permitido determinar que cuanto más lejos este una galaxia mas joven parece. Esto, debido al tiempo que tardo la luz emanada de ellas en ser captada por los telescopios, la cual, pudo haber sido de millones o miles de millones de años.
De esta manera es posible medir las diferentes distancias y tiempos cósmicos presentes en el espacio, ayudando así a descifrar con cuanta rapidez se produce la expansión del universo.
Mas de dos millones de galaxias y cuásares fueron medidos gracias al uso del telescopio Sloan Digital Sky Survey, logrando al final un mapa que abarca alrededor de 11 mil millones de años de historia cósmica no explorada con el cual será posible obtener un aprendizaje de la energía oscura como nunca antes.
Luego de las mediciones efectuadas el equipo determinó que alrededor de un 69% de la energía del universo está compuesta por energía oscura
Controversia sobre la expansión cósmica
Los resultados alcanzados con las mediciones permitieron también obtener una mejor comprensión de algunos planteamientos recientes asociados con la tasa de expansión del universo actual y la geometría del espacio.
En este sentido, al contrastar las observaciones realizadas con el estudio del universo durante su infancia se pudo comprobar la presencia de grietas en la descripción de su proceso evolutivo.
Con la medición efectuada por el eBOSS se obtuvo una tasa de expansión actual del universo de un 10% menos respecto al valor encontrado con los métodos directos de medición de distancias entre galaxias cercanas.
Una explicación posible a esta discrepancia podría deberse al rastro dejado por una forma de materia previamente desconocida del universo temprano, conocida también como «energía oscura temprana» de la que se piensa estaba presente durante la etapa de formación inicial del universo y que pudo haber afectado la tasa de expansión cósmica.
En lo que respecta a la geometría del espacio, estudios recientes del fondo cósmico de microondas sugirieron que esta podría tener una forma curva y no plana, hecho que resulta coherente con la teoría ampliamente aceptada del Big Bang, pero no así con el estudio del eBOSS, el cual determinó que, en realidad, el espacio es plano.
Pese a todas estas revelaciones, es probable que aun siga habiendo dudas dentro de la comunidad de cosmólogos en lo que respecta a la energía oscura, la naturaleza plana del espacio y sus polémicos índices de expansión actual.
Lo único que queda es avanzar en la realización de mapas más grandes y detallados del universo en un intento por encontrar respuestas que resulten concluyentes a cada una de estas interrogantes. Actualmente se conoce de varios proyectos a futuro que tienen como objetivo medir al menos 10 veces más galaxias que el estudio aquí descrito.