En los últimos años hemos visto muchos tipos de drones, pero no hay muchos que puedan meterse debajo del agua.
El que os presentamos hoy puede hacerlo, pero también puede volar, siendo un anfibio que vale la pena comentar. Se trata de Spry: el único dron impermeable que se sumerge bajo el agua, flota como un bote y vuela en el aire.
Nace en kickstarter y consiguió lo que pedían en menos de 1 hora. La cámara de Spry se inclina desde el control remoto, y usan policarbonato en su sistema de ingeniería óptica para proporcionar una alta transparencia sin distorsión.
Su batería intercambiable le permite volar durante 17 minutos y velocidades de hasta 70 kilómetros por hora. Fue sincronizado a alta velocidad con sus hélices estándar de dos palas, pero al instalar hélices de ángulo alto de 3 palas, podrá ir aún más rápido.
Es posible desbloquear las habilidades de Spry habilitando el modo manual completo. Esto enciende su GPS interno y la característica de nivelación automática y le permite volar como un avión no tripulado de carreras. Podemos también puede apagar el GPS y activar el Modo Acro para una experiencia de vuelo manual completa.
El control remoto del Spry tiene un monitor integrado de 4.3 pulgadas, y es posible obtener una experiencia más inmersiva con las gafas de vídeo de alta resolución Spry’s Video de 5.8 ghz.
Han estado estado trabajando en el diseño de Spry durante dos años. Cuentan con una serie de videos llamados «Inside Drones Factory» donde muestran las fábricas que fabrican los componentes para el Spry, y ahora están casi listos para comenzar la fabricación y el montaje.
Lo venden por 770 dólares en kickstareter, pero una vez llegue al mercado llegará casi a 1.000. Empazarán a enviar las unidades en diciembre de este año.