Aunque para mucha gente Twitter es la primera cosa que se abre al empezar el día, la página de inicio, la app del ascensor, parece que tiene los días contados, y hoy os comentamos algunas señales que indican que su fin está cerca, más cerca de lo que muchos desearíamos:
– Su crecimiento se ha estancado: Tal y como puede verse en el gráfico de statista.com, la cantidad de usuarios activos no crece desde hace años, habiendo registrado incluso bajadas en 2015.
– Su enfoque cambia demasiado frecuentemente: Las nuevas funciones que han ido presentado durante los últimos años no parecen estar relacionadas entre ellas, no tienen un objetivo común que ayude a mejorar el crecimiento de usuarios o a apuntar hacia un mejor modelo de negocio. Parece que no existe una única línea de pensamiento dentro de la empresa, por lo que seguimos viendo funciones más orientadas a atajar que a llegar a un destino concreto. Aumentar el límite de caracteres, crear momentos, eliminar los links y fotos del límite de los 140… nada de eso es realmente relevante para poder mantenerse activo en la web social.
– Su eterno problema de spam y trolls. Pese a que ha ido presentando varias herramientas dedicadas a parar las acciones de trolls y cuentas spam, cada día aparecen noticias relacionadas con abuso e intimidación por parte de varios usuarios. No han encontrado una forma efectiva de cortar el problema de raíz sin caer en los brazos de la censura.
– El cofundador se ha ido a Pinterest: Ayer supimos que Pinterest compró Jelly, proyecto de Biz Stone, cofundador de Twitter, y, a partir de ahora, parte del equipo. Aunque Biz Stone no tenía un papel muy activo dentro de Twitter, su migración a Pinterest puede indicar que hay ratas en el barco.
– Las acciones están por los suelos. En enero de 2014 llegó a los 64 dólares por acción, hoy está en los 15, y sigue bajando de forma alarmante, tal y como puede verse en investing: