Una de las más anheladas características de Gmail ha llegado a Inbox, su sucesor -o al menos, una enriquecida alternativa oficial-. Se trata de la opción para adjuntar archivos adjuntos con solo arrastrarlos y soltarlos en el panel de edición, incluso, si se trata de imágenes, éstas serán pegadas directamente en el cuerpo del mensaje.
Claro, la novedad aplica para la versión web de Inbox disponible en inbox.google.com resultando mucho más útil que adjuntar archivos buscándolos «manualmente» tras extensas rutas en el explorador de archivos.
Al igual que en Gmail, funciona con múltiples formatos de archivos de los que se puede enviar por correo electrónico (documentos, presentaciones, carpetas comprimidas, etc., en general, todo menos archivos ejecutables y carpetas sin comprimir). Por si fuera poco, se podrá arrastrar varios archivos en simultáneo para no tener que adjuntar uno por uno, y si se trata de imágenes, serán incrustadas específicamente en el lugar que se «suelten».
En fin, otra práctica característica implementada por Google para convencer a más gente de pasarse a Inbox resultando este último servicio de correo electrónico mucho más productivo y cada vez con más opciones emuladas del gran compendio ofrecido por Gmail. Queda faltando, por ejemplo, que más empresas e instituciones opten por Inbox en sus Google Apps -en móviles es quizá donde más se nota tal necesidad- y más posibilidades en la personalización de la bandeja de entrada.