Ya el pasado septiembre Microsoft anunció sus planes para comprar la división de Nokia Devices and Services, teniendo como fecha el primer cuarto de 2014 para cerrar el acuerdo – tal y como indican ambas partes.
Fue el 3 de septiembre de 2013 cuando leíamos la noticia, en la que nos explicaban que, dado el éxito de los smartphones Lumia de Nokia, Microsoft pretendía acelerar su crecimiento y ganancias en el sector de los dispositivos móviles a través de una mayor innovación y un mejor márketing, llevando como bandera una marca más unificada. Por otro lado, Nokia suponía que la transacción les sería de provecho para afianzar su posición económica.
Si os estáis preguntando el por qué del retraso en la firma del acuerdo, ésta se debe a la espera de aprobación de organizaciones antimonopolio en Asia. El proceso se encuentra en la etapa final de aprobación por parte de las autoridades de regulación global, y ahora mismo cuenta con el apoyo de éstas en 15 mercados de los cinco continentes.
Paralelamente al acuerdo, Nokia se encuentra negando el tener una deuda con Tamil Nadu en India, y por otro lado dicho estado que afirma que Nokia les debe 414 millones de dólares de impuestos no pagados. Aún así, el acuerdo debería llevarse a cabo en la fecha indicada en cuanto todas las autoridades acaben de dar el OK.