El equipo de Google ha anunciado cambios en la manera de exponer las imágenes que llegan a nuestros correos. Hasta el momento, cuando recibíamos correos de remitentes desconocidos se nos pedía autorización para mostrarlas, como una forma de proteger la integridad de nuestra cuenta y equipo.
Ahora ese proceso ya no es necesario, ya que las imágenes se mostrarán automáticamente al abrir el email. No significa que contemos con menos seguridad, sino que Google ha cambiado el proceso al manejar imágenes:
Gmail proporciona todas las imágenes a través de servidores proxy de imágenes de Google y las transcodifica antes de enviarlas para proteger a los usuarios como se indica a continuación:
Los remitentes no pueden utilizar la carga de imágenes para obtener información, como tu dirección IP o tu ubicación.
Los remitentes no pueden establecer o leer cookies en el navegador.
Gmail comprueba si las imágenes contienen virus o software malicioso conocidos.
Este cambio lo podremos ver desde la versión de escritorio a partir de hoy, extendiéndose esta opción iOS y Android a principios del año que viene. Pero si deseamos bloquear imágenes de determinados remitentes, podemos ir a configuración y personalizar esta opción.