Meta está en plena carrera por posicionarse en el panorama de la inteligencia artificial, y lo está haciendo a base de inversiones colosales. Con la construcción de nuevos centros de datos y una plantilla en expansión dedicada al desarrollo de modelos avanzados, la compañía liderada por Mark Zuckerberg ha destinado cifras asombrosas a esta causa. Se estima que sólo en infraestructura de EE. UU. se gastaran hasta 600.000 millones de dólares en los próximos tres años. Esta cifra, aunque comprensible dentro del ecosistema de Silicon Valley, ha encendido las alarmas en Wall Street.
Durante el informe de resultados del último trimestre, se hizo evidente el impacto financiero de esta estrategia. Los gastos operativos aumentaron en 7.000 millones de dólares respecto al año anterior, mientras que el gasto en capital creció en casi 20.000 millones. Todo ello sin que haya una fuente de ingresos clara que justifique este nivel de inversión. Zuckerberg fue tajante al decir que la compañía apenas empieza en su compromiso con la IA, lo que no fue precisamente música para los oídos de los inversores. Continúa leyendo «Meta, inteligencia artificial y el dilema del gasto sin retorno claro»