Siempre que se descubre algo nuevo sobre los tardígrados, los medios corremos como locos para contarlo. Parecen de otro universo, tienen característicass impresionantes que los transforman en el ser vivo más resistente de nuestro planeta, y ahora es posible mezclar parte de ellos con células humanas.
En una reciente investigación llevada a cabo por la Universidad de Wyoming, se ha descubierto cómo las proteínas de los tardígrados pueden ser integradas en células humanas para otorgarles una resistencia extraordinaria ante condiciones extremas. Este hallazgo abre nuevas puertas hacia la comprensión de la supervivencia celular y presenta potenciales aplicaciones en el ámbito de la medicina y la biotecnología.
Primero un poco de introducción para los que no habíais oído hablar de estos bichitos. Los tardígrados, también conocidos como osos de agua, son microorganismos famosos por su capacidad para sobrevivir en los ambientes más hostiles: desde el frío extremo hasta la exposición directa a la radiación y el vacío del espacio. Este increíble talento para resistir se debe, en parte, a su habilidad para ralentizar su metabolismo hasta casi detenerlo, un proceso que hasta ahora era un misterio para la ciencia.
El descubrimiento de la proteína CAHS D
El equipo de científicos de la University of Wyoming se enfocó en una proteína específica de estos seres, denominada CAHS D, conocida por su papel protector contra la desecación, es decir, la pérdida extrema de agua. Lo sorprendente es que, al expresar esta proteína en células humanas, se observó una ralentización del metabolismo, similar a lo que ocurre en los tardígrados bajo condiciones de estrés.
Este entendimiento nos ofrece una perspectiva completamente nueva sobre cómo podríamos mejorar la resistencia de las células humanas para aplicaciones médicas, como la conservación de órganos para trasplantes o el tratamiento de enfermedades mediante la estabilización de productos sanguíneos. Imaginad, por un momento, poder ralentizar el proceso de envejecimiento de nuestras células, o conservar tejidos y órganos en condiciones óptimas por mucho más tiempo de lo que es posible hoy en día.
No solo revolucionaría el mundo de los transplantes de órganos, también podríamos estar hablando de aumentar la calidad de vida de los mayores.
Aún así, es importante mantener las expectativas en su lugar. El paso de lo teórico a lo práctico puede estar lleno de desafíos, por lo que puede ser que al final todo quede en un estudio. Sin embargo, este tipo de investigaciones son un claro ejemplo de cómo entender mejor los mecanismos naturales puede tener un impacto directo y muy positivo en la vida humana.
Referencias
- Labile assembly of a tardigrade protein induces biostasis https://onlinelibrary.wiley.com/doi/10.1002/pro.4941