Un enjambre de miles de drones sincronizados, como una nube de pájaros, puede ser el arma definitiva en la defensa aérea de Estados Unidos.
Así lo informan desde la Marina de dicho país, donde dejan claro que quieren construir, desplegar y controlar miles de pequeños drones para que puedan agruparse y realizar acciones tanto defensivas como de ataque.
El objetivo es evitar que haya un dron controlado por una persona, y sí un enjambre, cientos o miles de drones, que se controlen como una sola unidad.
No es el único país que está pensando en el tema, es algo que ya hacen en China, Rusia, India, el Reino Unido, Turquía e Israel (que en 2021 se convirtió en la primera nación en usar enjambres de drones en combate).
Algunos detalles ya aparecen en los documentos presupuestarios, donde se indican planes ambiciosos para enjambres mucho más grandes que cualquier cosa vista hasta ahora.
Es importante no confundir enjambres de drones con los grupos que se usan para hacer figuras en el aire. En este segundo caso, cada dron vuela a lo largo de una ruta coreografiada y predeterminada, sin saber lo que están haciendo los demás. En un enjambre, los drones vuelan juntos y son conscientes de su entorno, de lo cerca que están unos de otros, y utilizan algoritmos para evitar obstáculos sin interponerse entre sí.
Pueden usarse para dispersarse para buscar en un área o realizar un ataque sincronizado, sirviendo también como misiles de crucero en miniatura.
Según los planes que se han descrito en los documentos, planean lanzar enjambres desde barcos, submarinos, aeronaves y vehículos terrestres, llevando sensores, bloqueadores y hasta ojivas.
Aunque ya hay varios proyectos que usan esta idea, todo parece indicar que se invertirá mucho dinero en evolucionar este concepto de forma que nunca antes habríamos imaginado.