Hoy en día, ya existe una idea preconcebida sobre cómo suelen ser los robots de cocina.
Ampliando ese concepto, irrumpió en el medio recientemente Cecilia, una camarera virtual que además de preparar tragos automáticamente, es capaz de sostener conversaciones entretenidas con las personas atendidas.
Algo más que sólo una máquina expendedora
Cecilia tiene la habilidad para sostener conversaciones dinámicas mientras mezcla bebidas, brindando una nueva clase de experiencia automatizada de preparación de tragos.
Su capacidad para reconocer voz y comunicarse le permite “atender” a las personas que se acercan, emulando la atención de una camarera, gracias a una inteligencia artificial que le permite sostener conversaciones, las cuales además de “seguir la corriente” de su interlocutor, pueden transmitir mensajes promocionales o simplemente alinearse con el tono comunicacional del evento en el que esté presente.
Esta IA conversacional es altamente personalizable y dentro de sus capacidades, además de entregar información, puede contar chistes, compartir chismes o conocer mejor a sus visitantes para conversar.
Fuera de lo novedoso que pueda ser contar con una camarera virtual, el hecho de que este dispositivo se controle a través de la voz, permite manejarlo sin contacto, algo muy útil en los tiempos que corren.
Además de sus capacidades comunicativas, el punto fuerte de este dispositivo es su capacidad con la coctelería. Cecilia es capaz de preparar una amplia gama de tragos con alta precisión, utilizando ingredientes a la medida, inspirándose en recetas elaboradas por reconocidos mixólogos. Este dispositivo es capaz de almacenar 70 litros para mezclas y de preparar más de 100 recetas de tragos. Acelerando su demanda al máximo, pasando por alto la posibilidad de entablar conversaciones, Cecilia es capaz de preparar 120 tragos por hora, es decir, uno cada medio minuto.
La experiencia de contar con Cecilia apoyando desde la coctelería puede aportar una dinámica especial de atención en determinados espacios, como eventos privados, bodas, galas, hoteles, aeropuertos, cruceros y un largo etcétera de posibles casos de uso.
Con un diseño moderno, Cecilia puede personalizarse con logos y otros elementos gráficos propios. Esto contempla también los LED laterales, que se pueden cambiar de color o bien, dejarlos aleatorizados en un “modo fiesta”.
Una pantalla adicional puede utilizarse como un control táctil complementario, con las opciones de tragos ofrecidas, aunque también, puede usarse para la exhibición de material audiovisual promocional.
La IA de Cecilia, además de sostener interesantes y entretenidas conversaciones, también puede ser de utilidad para el análisis de datos empresariales. Se puede conocer cuáles son las bebidas favoritas de los clientes atendidos, las horas pico y las palabras clave de uso común para obtener información útil para mejorar la experiencia e incrementar las ventas.
Cecilia puede trabajar 24 horas al día, los 7 días a la semana. Por las cualidades descritas, este servicio puede fidelizar a cierta parte de la clientela de una empresa y retener su imagen en la retina de la gente, quienes podrían recordar y difundir tu marca de manera orgánica y directa.
Aunque el “toque humano” siempre le agregará un valor extra a la atención brindada al momento de preparar un trago, en ciertos tipos de eventos Cecilia puede jugar un rol fundamental, sobre todo en aquellos espacios con aforo limitado por disposiciones sanitarias y como apoyo (y no sólo reemplazo) para bartenders reales, ante la necesidad de relevar turnos o apoyar en casos de alta demanda.
Para tener a Cecilia en tu evento, debes alquilar uno de estos dispositivos. Para conocer más detalles sobre sus prestaciones o solicitar una cotización, debes visitar cecilia.ai.