Los Data Centers podrían estar en el fondo del mar en un futuro próximo, o así cree Microsoft que debería ser, motivo por el cual han estado trabajando en esta tecnología y han podido probar ya su primer prototipo submarino.
«A cientos de pies bajo el oceano», así lo presentan en The New York Times, donde podemos ver claramente la ventaja: la reducción de la factura de la luz en aire acondicionado.
Los miles de servidores que componen un centro de datos causan un calor enorme, y con mucho calor, dichos servidores dejan de funcionar. Enfriar las máquinas siempre ha sido una prioridad en este sector, y poniéndolas bajo el mar podría ser una buena solución a este problema, aunque hay que resolver varios otros para hacerlo viable.
El proyecto de Microsoft, llamado Project Natick, conectaría los servidores submarinos, en el fondo del mar, con la superficie, vía fibra óptica, aunque aún se está planteando tener grandes contenedores bajo la superficie flotando como si de medusas se tratara, capturando energía con turbinas en el mismo oceano.
En el prototipo se ha podido comprobar su funcionamiento durante 105 días, con un centro de datos dentro de una cápsula de acero de unos 3 metros de diámetro que se colocó a 10 metros bajo el agua en el Océano Pacífico, frente a la costa central de California. El sistema bajo el agua fue equipado con 100 sensores diferentes para medir la presión, la humedad, el movimiento y otras condiciones para entender mejor cómo sería el día a día en un escenario de estas características.
Ahora han comenzado a diseñar un sistema tres veces más grande, por lo que parece que la idea está avanzando.