Microsoft ha dado un paso importante en la gestión de la inteligencia artificial en entornos corporativos con la presentación de Agent 365, una nueva plataforma pensada para administrar y asegurar agentes de IA en el contexto laboral. Este movimiento, anunciado en su evento Ignite 2025, responde a una preocupación creciente en el sector tecnológico: la proliferación descontrolada de agentes virtuales sin supervisión clara, lo que algunos expertos ya denominan como «agent sprawl«.
El reto de la proliferación de agentes
En el entorno empresarial actual, cada vez es más común que las organizaciones incorporen agentes de IA para automatizar tareas, asistir a empleados y optimizar procesos. Algunos de estos agentes son desarrollados internamente, otros provienen de herramientas de terceros, e incluso hay empleados que crean sus propios asistentes con plataformas abiertas. Esta diversidad, aunque poderosa, plantea un problema: ¿quién los controla?
Ahí entra en juego Agent 365 (A365). Microsoft propone un panel de control que centraliza la supervisión, seguridad y gobernanza de todos los agentes que acceden a datos empresariales, sean propios, de terceros o desarrollados por empleados. La idea es sencilla: si cada agente puede acceder a información sensible, interactuar con aplicaciones clave y tomar decisiones automatizadas, se vuelve imprescindible tratarlos como parte activa de la estructura digital de la empresa.
Gobernanza desde el corazón de Microsoft 365
A365 está integrado directamente en el centro de administración de Microsoft 365, lo que permite a los equipos de TI gestionar de forma unificada qué agentes pueden usarse, qué datos pueden consultar y cómo se comportan dentro del entorno corporativo. No se limita a los agentes creados con herramientas de Microsoft como Copilot Studio, sino que incluye también soluciones de terceros como Adobe, ServiceNow, Workday o n8n, así como frameworks de código abierto.
Una de las características más destacadas de Agent 365 es su tablero visual, que muestra las conexiones entre agentes, datos y usuarios. A través de este panel, los responsables de TI pueden observar en tiempo real el comportamiento y rendimiento de cada agente, identificando cuellos de botella, anomalías o posibles amenazas. Esta transparencia es fundamental para mantener el control sin frenar la innovación.
Seguridad adaptativa y trazabilidad total
Cada agente gestionado por A365 recibe una identificación única a través de Microsoft Entra ID, lo que permite aplicar políticas de seguridad adaptativas basadas en riesgos. Por ejemplo, si un agente comienza a mostrar comportamientos sospechosos, se pueden aplicar restricciones automáticas o incluso desactivarlo temporalmente para evitar brechas de seguridad.
Microsoft también integra funcionalidades de Defender y Purview dentro de Agent 365. Defender ayuda a detectar amenazas conocidas o emergentes que puedan dirigirse a los agentes, mientras que Purview impide que estos accedan a datos confidenciales de forma indebida o los filtren fuera del entorno corporativo.
Este enfoque convierte a los agentes en una suerte de empleados digitales con responsabilidades, permisos y seguimientos similares a los de un trabajador humano. Como dijo Alastair Woolcock, analista de Gartner, Microsoft está «contratando agentes dentro del organigrama«, lo cual transforma la forma en que concebimos la inteligencia artificial en el trabajo.
Unificación de la orquestación de agentes
Con la introducción de A365, Microsoft busca posicionarse como la plataforma central de orquestación de agentes de IA dentro de las organizaciones. Esta estrategia no solo está orientada a productos de la casa, sino que obliga a otros proveedores a adaptarse a esta capa de gobernanza si quieren ser parte del ecosistema empresarial de Microsoft.
Empresas como Google, AWS y ServiceNow también están desarrollando sus propias propuestas de control de agentes, pero Microsoft tiene una ventaja significativa: su presencia directa en el flujo de trabajo cotidiano de millones de usuarios a través de Office, Teams y otras herramientas de Microsoft 365. Esta cercanía podría facilitar la adopción de Agent 365 sin necesidad de integrar sistemas adicionales, lo que supone una ventaja logística para los departamentos de TI.
Desafíos y perspectivas a futuro
A pesar de sus promesas, todavía quedan preguntas abiertas. Algunos expertos como Jack Gold se preguntan si realmente A365 permitirá integrar sin fricciones a agentes no desarrollados por Microsoft. Aunque la compañía ha asegurado que sí, la experiencia indica que estas integraciones suelen llevar tiempo y ajustes.
Por ahora, Agent 365 está disponible en acceso anticipado a través del programa Frontier, y Microsoft anunciará detalles sobre precios cuando se acerque su lanzamiento general. En cualquier caso, el enfoque es claro: crear una capa de control transversal que permita que los agentes de IA trabajen con libertad, pero bajo supervisión constante y responsable.
Este equilibrio entre libertad e infraestructura será clave para que las empresas puedan aprovechar al máximo el potencial de la inteligencia artificial sin comprometer su seguridad ni perder el control de su información.