En los últimos años, el uso de la inteligencia artificial (IA) ha revolucionado diversos campos, y la micología no es una excepción. En la provincia de Soria, el Centro de Servicios y Promoción Forestal y de su Industria de Castilla y León (Cesefor) ha llevado a cabo un innovador estudio que aplica modelos de aprendizaje automático para cuantificar y predecir la producción de setas en los pinares mediterráneos gestionados de manera sostenible.
Innovación y sostenibilidad en los pinares mediterráneos
La investigación de Cesefor, publicada en la revista ‘Sustainability’, se centra en el uso de la IA para evaluar el potencial micológico de los pinares de pino marítimo en Soria. Este trabajo es especialmente relevante considerando cómo la producción de setas, como el níscalo (Lactarius deliciosus), puede verse afectada por factores climáticos, del suelo y la topografía. Para ello, se utilizaron datos a largo plazo de los rendimientos de setas en 17 parcelas, integrando información estructural del bosque, índices de vegetación de la misión Landsat de la NASA y datos climáticos (Heraldo Diario de Soria).
La IA como herramienta clave
Utilizar la inteligencia artificial permite superar la variabilidad espacial y temporal que caracteriza la fructificación de los hongos silvestres. En este sentido, se emplearon técnicas avanzadas de aprendizaje automático como árboles de clasificación, bosques aleatorios, máquinas de vectores de soporte y redes neuronales. Estos modelos ayudan a crear un índice de «aprovechabilidad micológica» en dos etapas, similar a lo que se realiza con otros usos forestales como la madera o la caza. Esto facilita la inclusión de la producción micológica prevista en la gestión forestal sostenible (Cesefor).
Aplicaciones prácticas y beneficios
El uso de IA no solo mejora la capacidad de predicción y gestión, sino que también destaca la importancia de los hongos en los ecosistemas. Estos organismos juegan un papel fundamental en servicios de aprovisionamiento, regulación, culturales y de apoyo. Sin embargo, su producción puede verse gravemente afectada por sequías inducidas por el cambio climático. En este contexto, las herramientas de IA y las observaciones teledetectadas son cruciales para modelizar y gestionar de manera eficiente estos productos forestales no madereros.
Proyectos y colaboraciones
El Cesefor no solo se dedica a la investigación micológica. Su implicación en proyectos diversos y su colaboración con instituciones como la Universidad de Valladolid y la Diputación de Palencia, le permite abordar múltiples áreas del conocimiento forestal. Por ejemplo, proyectos como ‘Smurf’ y ‘Habitable’ buscan mejorar la gestión forestal y la formación profesional en el sector del hábitat, respectivamente. Además, iniciativas como ‘Life HFH’ y ‘Tila’ abordan la bioeconomía forestal y la sostenibilidad de los hayedos, lo que subraya la amplia gama de actividades en las que está involucrado el centro.
En mi opinión, la aplicación de IA en la gestión de recursos naturales es un paso fundamental hacia un futuro más sostenible. Este enfoque no solo optimiza la producción y conservación de los ecosistemas, sino que también ofrece soluciones innovadoras frente a desafíos como el cambio climático. En WWWhatsnew.com, hemos abordado varias veces el impacto de la tecnología en la sostenibilidad y es inspirador ver cómo instituciones como Cesefor están a la vanguardia de esta revolución verde.
El desarrollo de herramientas de IA para la gestión forestal no solo tiene el potencial de mejorar la productividad y la sostenibilidad, sino que también puede servir de modelo para otras regiones y sectores. Esta integración de tecnología y naturaleza es, sin duda, una tendencia que seguirá creciendo en los próximos años.