La NASA ha marcado un hito en la historia de la comunicación espacial con su nave Psyche, logrando transmitir datos a través de un láser a una distancia sin precedentes de 225 millones de km. Este avance representa un récord de distancia, superando incluso la distancia que nos separa del Sol, pero destaca por la velocidad alcanzada en la transmisión de datos, que llegó hasta los 25 Mbps, cifra que se equipara a las recomendaciones de velocidad para la transmisión de contenido en 4K por servicios como Netflix (lejos aún del record de velocidad en Internet).
A diferencia de las frecuencias de radio, que han sido la columna vertebral de la comunicación en el espacio profundo durante décadas, los láseres ofrecen una capacidad significativamente mayor para la transmisión de datos. La luz puede llevar más información que las ondas de radio, lo que permite enviar paquetes de datos más grandes y a una velocidad mucho mayor. Esta tecnología no solo acelera la transmisión de información, sino que también mejora la calidad y la cantidad de datos enviados desde y hacia destinos interplanetarios.
La nave Psyche de la NASA, en camino hacia el cinturón de asteroides, fue equipada con el instrumento Deep Space Optical Communications (DSOC), diseñado específicamente para este tipo de transmisiones. En una prueba realizada el 8 de abril, se logró enviar datos a una velocidad de 25 Mbps al Observatorio Palomar en California, superando ampliamente el objetivo inicial de 1 Mbps. Este logro es un claro indicador del potencial de las comunicaciones ópticas en misiones futuras, incluyendo las que podrían llevar al ser humano a Marte.
El equipo de la misión no se detuvo con un solo éxito. También realizaron pruebas enviando datos desde estaciones terrestres a la nave y viceversa, cubriendo una distancia total de ida y vuelta de 280 millones de millas (450 millones km) en una sola noche. Además, se experimentó con la recepción de señales usando múltiples receptores en diferentes regiones del mundo, lo que demostró la capacidad de la tecnología para adaptarse a diferentes condiciones y posibles interrupciones causadas por el clima.
Este conjunto de pruebas y resultados refuerza la viabilidad de las comunicaciones láser para futuras exploraciones espaciales, y plantea una mejora considerable en la manera en que recibiremos datos de alta resolución de misiones en otros planetas, una capacidad crucial para la próxima era de la exploración espacial.
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