Netflix podría haber pagado a Facebook para acceder a nuestros mensajes privados

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En los últimos días ha salido a la luz una supuesta colaboración entre Netflix y Facebook, que implica un intercambio de información privada de los usuarios y una inversión publicitaria millonaria.

La demanda con los datos está en este enlace, una demanda que recomiendo leer para entender mejor las implicaciones de lo ocurrido.

Beneficio mutuo entre Netflix y Facebook

Veamos el mapa mental de la noticia:

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Los documentos judiciales sugieren que Meta concedió a Netflix un acceso sin precedentes a los mensajes directos de los usuarios en Facebook durante casi una década. Este acuerdo especial implicaba un intercambio de datos y una considerable inversión publicitaria por parte de Netflix, específicamente mencionada en 150 millones de dólares en el año 2017.

Este intercambio de favores entre Netflix y Facebook parece haber sido mutuamente beneficioso. Por un lado, Netflix optimizó sus campañas publicitarias en la red social, potencialmente accediendo a información detallada sobre los intereses y comportamientos de los usuarios. Por otro lado, Facebook se benefició de una fuente de ingresos publicitarios sustancial.

Una API para acceder a nuestros mensajes

Una de las revelaciones más inquietantes es la mención de la Titan API, una herramienta exclusiva que permitía a socios seleccionados, como Netflix, acceder a mensajes y posiblemente a información sobre los amigos de los usuarios, incluso aquellos que no utilizaban la app de mensajería de Facebook.

Este asunto ha despertado preocupaciones sobre la privacidad, pero también ha puesto en relieve las relaciones entre grandes corporaciones tecnológicas y cómo estas pueden influir en el mercado. La demanda, presentada por ciudadanos estadounidenses, busca respuestas y potencialmente reparaciones por estas prácticas.

Las empresas involucradas han ofrecido declaraciones que buscan clarificar su posición. Meta, por ejemplo, ha negado compartir mensajes privados con Netflix, aclarando que los acuerdos permitían a los usuarios compartir contenido de Netflix en sus mensajes de Facebook.

Será uno de los casos más relevantes de este año en materia de privacidad, pero algo me dice que Netflix y Facebook son solo la punta del iceberg en una industria donde los datos son el activo más valioso. Como consumidores, debemos estar atentos y exigir claridad y respeto por nuestra privacidad, aunque pocas veces obtengamos respuestas.

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