La NASA ha lanzado un nuevo instrumento de monitoreo de calidad del aire llamado TEMPO (Tropospheric Emissions Monitoring of Pollution), el cual se encuentra en una órbita de rotación fija alrededor de la Tierra. El dispositivo tiene la capacidad de detectar algunos de los contaminantes atmosféricos más peligrosos como dióxido de nitrógeno, formaldehído y ozono a nivel del suelo. Estos químicos son los principales causantes de la formación de smog, un problema importante de salud pública en las grandes ciudades del mundo.
Un gran avance en el monitoreo de la calidad del aire
El instrumento TEMPO fue lanzado con éxito por un cohete SpaceX Falcon 9 desde la Estación de la Fuerza Espacial de Cabo Cañaveral en Florida. Este dispositivo se encuentra en una órbita geostacionaria fija justo sobre el ecuador y mide la calidad del aire en Norteamérica cada hora, con mediciones espaciadas solo por unos pocos kilómetros.
Con la capacidad de tomar mediciones de un vecindario a otro, TEMPO brinda una visión integral de la contaminación atmosférica tanto a nivel macro como micro. Esto ofrece oportunidades únicas para recopilar nuevos tipos de datos, como los cambios en los niveles de contaminación durante las horas pico, los efectos de los rayos en la capa de ozono, el movimiento de la contaminación relacionada con los incendios forestales y los efectos a largo plazo de los fertilizantes en la atmósfera, entre otros puntos de datos.
El hermano mediano en la familia de monitores de calidad del aire
TEMPO es el segundo de una serie de tres instrumentos de monitoreo de alta potencia para la contaminación. En 2020, el Geostationary Environment Monitoring Spectrometer de Corea del Sur se lanzó para medir la contaminación en Asia, y en 2024 el satélite Sentinel-4 de la Agencia Espacial Europea se lanzará para medir la contaminación en Europa y África del Norte. Otros satélites de seguimiento se unirán a TEMPO en el futuro para monitorear la calidad del aire.
La nueva estrategia empresarial de la NASA para enviar instrumentos al espacio
Es interesante mencionar que TEMPO fue lanzado en un cohete SpaceX y no en uno de la NASA. Esto se debe a que la agencia está probando un nuevo modelo de negocio para enviar instrumentos críticos al espacio. Pagar a una empresa privada parece ser la opción más económica en comparación con enviar un cohete propulsado por la propia NASA.
La NASA siempre ha sido líder en el uso de tecnología avanzada para la investigación y exploración del espacio. Ahora, con TEMPO, la agencia demuestra su compromiso en el monitoreo de la calidad del aire en la Tierra, lo cual es una señal de la importancia que se le está dando a este tema en todo el mundo.
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