En un esfuerzo para atraer al mercado masivo y contribuir al medio ambiente, Toyota presentó dos vehículos remodelados, equipados con sistemas de propulsión de cero emisiones en un evento reciente.
Estos dos vehículos, pertenecientes a una serie fabricada entre 1983 y 1987, fueron convertidos a dos tecnologías que están emergiendo con fuerza en el sector automotriz: uno fue modificado como un vehículo eléctrico de batería y el otro como un modelo con motor de hidrógeno.
Toyota presentó un kit para convertir coches clásicos en vehículos libres de emisiones
Este movimiento estratégico de Toyota es una iniciativa que persigue el fin de llegar a un público más amplio, ya que la compañía busca ganar interés entre los propietarios de automóviles existentes a gasolina y diésel, incluidos los fanáticos de los modelos clásicos.
La decisión de adaptar los vehículos más antiguos con unidades no contaminantes podría tener consecuencias positivas desde la perspectiva de la ecología global. Comprar un nuevo automóvil híbrido o completamente eléctrico puede ser aún demasiado costoso para muchos propietarios de automóviles, mientras que reemplazar su motor podría ser justo lo que necesitan, una solución más económica.
En su mercado local, el japonés, esta propuesta podría brindar una gran ayuda, ya que solo uno de cada 20 automóviles, o alrededor del 5% de todos los vehículos en circulación, son nuevos. La mayoría de los modelos más antiguos que aún están en circulación funcionan con diésel o gasolina.
Akio Toyoda, presidente de Toyota, dijo en su discurso que se debe explorar la remodelación de los autos existentes como una de las formas de alcanzar la meta de cero emisiones de carbono para 2050. Para concretar este propósito, la empresa está invirtiendo $70 mil millones de dólares para electrificar sus vehículos y aumentar la producción de baterías. Su objetivo actual es vender al menos 3,5 millones de vehículos eléctricos de batería en 2030.
Esta propuesta de Toyota es una iniciativa interesante para contribuir al cuidado del medio ambiente y ofrecer al mismo tiempo una opción asequible para los propietarios de automóviles existentes, que bajo las proyecciones de los programas ecológicos implementados en cada vez más partes del mundo, deberían quedar fuera de circulación durante las próximas décadas.