El cerebro es un órgano del cuerpo desde el cual se ejerce el control de nuestras facultades físicas y mentales. Sin embargo, con el paso del tiempo el cerebro va experimentando una degradación gradual en su capacidad de procesamiento de la información.
Una consecuencia de esto es la afectación de la memoria a corto plazo, la cual permite que la persona pueda retener información por un breve periodo de tiempo.
En ese sentido, se dio a conocer recientemente el trabajo llevado por un equipo de científicos en este ámbito, el cual está centrado en investigar el potencial que tendría una terapia láser no invasiva para ser implementada como un procedimiento que contribuiría a mejorar la función cognitiva.
Cabe mencionar que esta investigación ya ha arrojado unos primeros resultados que lucen bastante prometedores, aunque aún resulta necesario hacer correcciones en algunos aspectos.
No obstante, el equipo ha conseguido potenciar la memoria a corto plazo en seres humanos a través del direccionamiento efectuado con determinadas longitudes de onda de luz láser sobre regiones específicas del cerebro.
Con el nombre de fotobiomodulacion transcraneal (tPBM) se ha catalogado este tratamiento experimental, el cual consiste en el envío de fotones de luz a través del cráneo con el propósito de provocar cambios en la actividad cerebral. Los estudios sugieren el poder que tiene esta tecnología para provocar mejoras en los distintos aspectos de la función cerebral, entre ellos la oxigenación.
Además, los investigadores están estudiando el uso que podría dársele a este tratamiento para reducir los efectos provocados por el Parkinson y el Alzheimer.
Añadido a esto, se están investigando la manera en que esta tecnología podría resultar beneficiosa para las personas que sufren del trastorno del espectro autista.
Por otra parte, se pudo comprobar los beneficios que tuvo la tPBM sobre la memoria en ratones. Posteriormente, científicos de la Universidad de Birmingham y de la Universidad Normal de Pekín (China) tomaron a un grupo de 90 personas de ambos sexos con edades comprendidas entre 18 y 25 años para llevar a cabo en estos una terapia de luz láser aplicada en el córtex prefrontal derecho del cerebro.
Cabe mencionar que algunos pacientes fueron tratados con luz láser dotada con longitudes de onda de 1.064 nanómetros mientras que otros fueron expuestos a longitudes de onda más cortas. En otros casos el tratamiento fue aplicado sobre la corteza prefrontal izquierda.
Al cabo de 12 minutos de tratamiento a los pacientes les fue solicitado que realizaran tareas de memoria.
Estas luego dieron como resultado una media de 2,1 objetos recordados por parte de aquellos pacientes que recibieron terapia láser con longitudes de onda de 1.064 nanómetros, la cual resulto superior a la media de 1,9 alcanzadas por los pacientes que recibieron un tratamiento diferente, representando esto una mejora del 10%.
Respecto a esto, el coautor del estudio Dongwei Li expreso lo siguiente:
Las personas con afecciones como el TDAH (trastorno por déficit de atención con hiperactividad) u otros trastornos relacionados con la atención podrían beneficiarse de este tipo de tratamiento, que es seguro, sencillo y no invasivo, sin efectos secundarios