Elon Musk, CEO de Tesla, celebró una reunión con inversores hace pocos días, y en ella los accionistas votaron sobre temas relacionados con reelección de directores, medio ambiente y gobernanza.
Durante la reunión se marcó como objetivo alcanzar una tasa de producción de 2 millones de vehículos anuales para fines de 2022, así como la intención de crear más fábricas por el mundo, con Canadá como posible nuevo objetivo.
Actualmente Tesla tiene fábricas en California y Shanghái, y ampliará dos en Austin, Texas y Berlín, Alemania, pero quieren llegar a tener unas 10 o 12.
El caso es que también hablaron del robot humanoide Optimus, un robot que presentarían el 19 de agosto, pero que ahora han pospuesto hasta el 30 de septiembre. Hemos visto, eso sí, un prototipo de sus manos, manos robóticas haciendo un signo de corazón.
Fue en enero la primera vez que anunciaron el desarrollo de Optimus Subprime, un robot humanoide bípedo que, supuestamente, realizaría tareas aburridas y repetitivas que los humanos preferirían no hacer.
Se espera que la primera versión de Optimus comience a producirse en 2023, y Elon Musk está seguro que cambiará nuestra idea de lo que es la economía:
Será capaz de hacer básicamente cualquier cosa que los humanos no quieran hacer. Lo hará. Traerá una era de abundancia. Puede ser difícil imaginarlo, pero a medida que veas cómo se desarrolla Optimus, transformará el mundo en un grado incluso mayor que el automóvil.
Falta poco para ver más detalles de lo que es capaz de hacer este robot, aunque ya sabemos que no podemos nunca tomar las palabras de Elon Musk al pie de la letra.