El Kindle ha lanzado varias versiones desde 2007, abriendo los ojos a un sector extremadamente fértil, el de la lectura de libros electrónicos.
La primera generación, con su pantalla de tinta electrónica, tiene ya 15 años, sin conectividad 3G, pero que funciona aún en muchos hogares. Ese es el Kindle que no podrá usar la tienda integrada a partir de agosto de este año.
Los propietarios de estos dispositivos están ya recibiendo un email de Amazon con la advertencia, algo que está afectando a los Kindle de quinta generación y anteriores, que no podrán buscar, tomar prestados ni comprar libros directamente.
Lo que sí podrán hacer es mostrar libros, por lo que aún podremos realizar las compras en la web de Amazon y enviar el libro a nuestro Kindle, no tendremos que tirar el Kindle a la basura.
Se trata así de un problema de actualización de software. Las nuevas versiones de la tienda integrada en el dispositivo requieren una potencia mayor, por lo que no será posible abrirla desde los Kindle viejos.
También podremos acceder sin problemas a la biblioteca de libros electrónicos existente, por lo que si tienes miles de libros ahí dentro, esperando una segunda lectura, podrás seguir disfrutando de Kindle varias décadas más (si la batería lo permite, ya que suele ser lo primero que se estropea en el mundo de la electrónica de consumo).
Los usuarios afectados recibirán también un código promocional para obtener un 30% de descuento en un nuevo Kindle, y 40 dólares para comprar libros, por lo que seguramente en Navidad tendremos pedidos de Kindle nuevos hasta en la sopa.