Digitalizar un país es mucho más que ofrecer dinero a las pymes para que hagan su página web, y mucho más que pagar a miles de personas para que gestionen redes sociales. Estamos hablando de un proyecto enorme que tiene que realizar muchos pasos, y adquirir cierta independencia en el mundo de los semiconductores es fundamental.
Ahora el gobierno de España aprobó un plan para gastar 12 250 millones de euros en la industria de semiconductores y microchips para 2027, la cuarta parte de lo que Elon Musk dijo que pagaría para comprar Twitter, pero ya es un gran paso, sin duda.
Se gastarán 9 300 millones para la construcción de plantas, y el resto en investigación, diseño y otros. Es un dinero que llega en parte de los fondos de ayuda para la pandemia de la Unión Europea, dinero que debe usarse para impulsar la economía digital y atender a la demanda creada por la escasez de chips.
La idea es potenciar la capacidad de diseñar y producir microelectrónica y semiconductores. Quieren cubrir toda la cadena de valor, desde el diseño a la fabricación, sin depender de otros países en el proceso.
La escasez de chips a puesto en las cuerdas a varios fabricantes, incluyendo Volkswagen y Renault, que detuvieron parcialmente las líneas de montaje, generando problemas no solamente a los consumidores, también a los miles de trabajadores de estas empresas.
Se trabajará en semiconductores de vanguardia (por debajo de 5nm) y de gama media (por encima de 5nm) con una inversión de 9 300 millones, y se dedicarán 1 300 millones en el diseño de chips.
La idea también es apoyar a las empresas españolas en proyectos estratégicos desarrollados a nivel europeo, y se creará un proyecto dedicado a financiar nuevas empresas y ampliaciones en el sector español de semiconductores.
Esperemos que los plazos se cumplan y que en algunos años no dependamos tanto del turismo y sí podamos destacar en muchas otras áreas sin depender de otros mercados.