Los sistemas de IA que imitan el funcionamiento del cerebro pueden ser más precisos

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En el campo de la inteligencia artificial, se conoce como redes neuronales a los sistemas que, a modo de red, cuentan con distintas “neuronas” interconectadas, que trabajan de forma colaborativa, sumando en conjunto experiencia para aprender a resolver ciertas tareas.

Concretamente, el desarrollo de este tipo de tecnología ha recaído principalmente en el ala matemática de la comunidad científica. Ahora, un nuevo estudio reafirma que las redes de inteligencia artificial basadas en el sistema de conectividad del cerebro humano pueden realizar tareas cognitivas de manera eficiente, invitando a profesionales de la neurociencia y la IA a desarrollar soluciones en conjunto.

La IA podría potenciarse si se desarrollan investigaciones híbridas entre neurociencia e informática

En Canadá, un equipo de investigadores de The Neuro (Montreal Neurological Institute-Hospital) y el Quebec Artificial Intelligence Institute, comenzaron a investigar estas redes neuronales artificiales, para observar cómo estos sistemas pueden realizar una tarea de memoria cognitiva.

El análisis fue abordado inicialmente estableciendo un símil entre estas redes de IA y la conectividad cerebral, pasando por alto cómo realmente realizan cálculos y funciones. No obstante, las redes neuronales artificiales tienen usualmente estructuras arbitrarias, que no reflejan cómo se organizan las redes cerebrales reales. 

Con aquel ejercicio, los investigadores esperaban aprender cómo influye el “cableado” del cerebro ante habilidades cognitivas específicas y así inspirarse para diseñar nuevos principios de funcionamiento para las redes artificiales.

A diferencia de otras arquitecturas de referencia, los investigadores descubrieron que las redes neuronales estudiadas eran capaces de realizar tareas de memoria cognitiva de una manera mucho más flexible y eficiente. Estos sistemas fueron capaces de utilizar la misma arquitectura para apoyar una amplia variedad de capacidades de aprendizaje en variados contextos.

Un artículo que presenta un reporte de este estudio fue divulgado esta semana en la revista Nature Machine Intelligence. A propósito de aquella publicación, conversación con la Universidad McGill de Canadá, Bratislav Misic, investigador de The Neuro y autor principal del artículo, comentó que «La neurociencia y la IA comparten raíces comunes, pero recientemente han divergido. El uso de redes artificiales nos ayudará a entender cómo la estructura cerebral apoya la función cerebral. A su vez, el uso de datos empíricos para crear redes neuronales revelará los principios de diseño para construir una mejor IA. Por lo tanto, los dos se ayudarán a informarse mutuamente y enriquecer nuestra comprensión del cerebro», agregando que este proyecto ”unifica dos disciplinas científicas vibrantes y de ritmo rápido».