Pese a los avances en las capacidades de las tecnologías de carga rápida inalámbrica, en China están estudiando imponer un techo máximo de potencia por motivos de seguridad e interferencias en otros sistemas, según se hace eco ahora el portal chino Mydrivers.
El citado medio informa ahora de que el Ministerio de Industria y Tecnología de Información de China colgó un borrador en su sitio web el pasado mes de febrero acerca de una nueva normativa en la que limitará la capacidad de estas a una potencia máxima de 50W, aceptando la recepción de comentarios para su mejora.
Ordenando el espacio radioeléctrico por motivos de seguridad
En el citado borrador argumentan que la potencia de carga rápida inalámbrica demasiado alta pudiera llegar a ocasionar problemas para la aviación, para el transporte marítimo, la observación astronómica, entre otros aspectos.
Este tope en la potencia máxima choca de frente en avances como el visto recientemente con Xiaomi y su sistema de carga inalámbrica de 120W.
Aclarar que los fabricantes sí podrán comercializar y distribuir dispositivos con potencia máxima superiores en mercados internacionales, afectando la limitación únicamente al mercado interior.
A tal efecto, la normativa, que aún no está en vigor, pretende establecer una regulación ordenada de recursos del espectro radioeléctrico a los sistemas de carga inalámbrica para evitar interferencias en otros soportes.
Quizás sea el primer paso de lo que pueda llegar en otros mercados en un futuro
De esta manera, si algún fabricante lanza un dispositivo con carga inalámbrica por encima de los 50W, el gobierno de China podría suspender su disponiblidad en los mercados interiores.
De momento no sabemos si otros mercados seguirán a la zaga o será en China donde estará únicamente esta limitación.
En este punto, es posible que a lo largo del tiempo puedan aparecer estudios que busquen establecer posibles problemas entre los sistemas de carga inalámbrica que puedan afectar a otros aspectos.
Con ello en mente, es posible que en un futuro pudiese llegar nuevas regulaciones en otros mercados que puedan mermar las capacidades de los sistemas más novedosos en aras de la seguridad, por lo que será cuestión de tiempo que esto se vaya desarrollando según vayan llegando los avances de los diferentes fabricantes.
Como siempre, ya será cuestión de esperar a que los diferentes mercados traten de regular el espacio radioeléctrico acorde a los avances en materia de carga rápida inalámbrica, como ya estamos acostumbrados a ver.