No cabe duda que la propagación del COVID-19 trajo consigo cambios que afectaron por completo nuestro estilo de vida, entre ellos el uso frecuente de mascarillas en espacios públicos. No obstante, el uso masificado de este elemento ha representado una amenaza para el medio ambiente.
Es tanto el impacto ambiental que han generado las mascarillas desechables, que durante el 2020 se reportó que mas de 1.560 millones de estas fueron arrojadas a los océanos, hecho del que desafortunadamente se espera vaya en alza a lo largo de 2021.
Pero es que además de los océanos, los vertederos constituyen otro de los focos donde se concentra una gran cantidad de mascarillas desechadas.
Esto ha hecho que un grupo de investigadores de la universidad RMIT de Melbourne en Australia tomara la iniciativa de generar una solución que contribuyera con el reciclaje de estas mascarillas, convirtiéndoles en material de carretera para ayudar a reducir su impacto contaminante en el medio ambiente.
Cómo se reciclan mascarillas para la construcción civil
Para hacer esto posible el equipo tomó las mascarillas y las trituro, mezclándolas luego con escombros de construcción procesados. Al final, se obtuvo un material apto para la construcción de carreteras que cumplió exitosamente las normas de seguridad de la ingeniería civil.
El equipo estima que con una cantidad de 3 millones de mascarillas recicladas y trituradas se podría obtenerse el suficiente material para pavimentar un kilometro de una carretera de dos carriles.
De esta manera se impediría que una cantidad de 93 millones de toneladas de mascarillas descartables terminaran en los vertederos, ayudando a reducir considerablemente su acumulación en estos sitios.
Para llevar a cabo su proyecto el equipo enfocó su atención en los escombros de construcción procesados, los cuales poseen las cualidades para ser usados como capa base para las carreteras.
Luego de integrar las mascarillas trituradas al material de construcción el equipo descubrió que estas ayudaban a mejorar sus propiedades notablemente. Al momento de llevar a cabo la mezcla se utilizó un 1% de mascarillas trituradas y un 99% de agregado de concreto reciclado.