Desarrollan dron con capacidad para volar guiado por olores

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Desarrollan dron con capacidad para volar guiado por olore

Notables por tener la capacidad de alcanzar lugares limitados para los seres humanos, los drones, esos pequeños robots voladores, cuentan también con la ventaja de poder acceder a zonas que representen un riesgo para el hombre.

Ya sean estructuras inestables a causa de una catástrofe natural o un terreno minado, no cabe duda que los drones se han convertido en un aliado muy útil para el ser humano.

No obstante, muchos investigadores han expresado su deseo de llevar las capacidades de los drones más allá. Esto, llevando a cabo el desarrollo de modelos que puedan ejercer su vuelo en estos difíciles entornos a través del olfateo de sustancias químicas presentes en el aire.

De esta manera el dron podría llevar a cabo la búsqueda de supervivientes de catástrofes, explosiones, fugas de gas u otras situaciones que pudieran propiciar el desplazamiento del dron a través del olor.

No obstante, la mayoría de los sensores artificiales presentes en los drones actuales no logran ser lo suficientemente sensibles, ligeros o rápidos para capturar e interpretar olores específicos mientras estos se encuentran en pleno vuelo.

Es ahí donde un equipo de la Universidad de Washington en Seattle, Estados Unidos, a cargo de Melanie Anderson entró en acción y se dispusieron a crear el Smellicopter. Este dron de carácter autónomo cuenta con la capacidad para detectar olores y volar hacia ellos gracias a la presencia de una antena viviente de una polilla.

Sumado a ello, el Smellicopter no solo puede detectar olores sino también evadir obstáculos mientras lleva a cabo su vuelo en el aire.

Respecto a la naturaleza híbrida que presenta el aparato, Anderson expresó lo siguiente:

Al utilizar una antena real de polilla en el Smellicopter, podemos obtener lo mejor de ambos mundos: la sensibilidad de un organismo biológico en una plataforma robótica de la que podemos controlar su movimiento

Al momento de llevar a cabo la integración de las antenas de polilla en el Smellicopter, el equipo optó por usar las de la especie Manduca Sexta. Así fue que los investigadores tomaron las polillas y las colocaron en la nevera para someterlas luego a anestesia y removerles una de sus antenas.

Cabe destacar que esta antena puede permanecer viva y químicamente activa por un periodo de 4 horas tras ser removida del cuerpo del insecto. Este tiempo puede ser extendido simplemente conservando la antena en un frigorífico. Al final, el Smellicopter no requiere de la asistencia de los investigadores para rastrear los olores.