Reconocida por sus icónicos telemas de enfoque manual y por su capacidad para la construcción de cámaras premium sin espejo, no cabe duda que Leica es una de las mayores exponentes en lo que respecta al sector de la fotografía, ofreciendo los mejores modelos para llevar a cabo esta tarea.
En esta ocasión la empresa alemana nos presenta la M10-R, una cámara que destaca por ser la de mayor resolución hasta el momento con sus 41 megapíxeles.
Y es que, a diferencia de los anteriores modelos de cámara Leica, esta dispone de características orientadas a favorecer la fotografía de paisajes y ciudades, en las cuales siempre se persigue captar todos los detalles posibles.
El sensor de alta resolución de 40,9 megapíxeles representa el atributo más notable de la M10-R, todo un salto en comparación con los 24 megapíxeles del modelo M10-P, aspecto que también incide favorablemente sobre la utilidad de las cámaras en diferentes aspectos.
Su desempeño en la toma de paisajes y retratos es excelente, ofreciendo una nítida resolución en el enfoque de objetos o estructuras, siendo, además, de gran utilidad en el área de la fotografía callejera.
Además, en el caso de encontrarte lejos del objetivo que deseas enfocar, la cámara M10-R te permite realizar un acercamiento de hasta un 30%, logrando el mismo campo de visión ofrecido por los modelos de 24 megapíxeles.
Pasando a la estética, esta cámara presenta una estructura elegante, idéntica a la del modelo antecesor de 24 megapíxeles con quien también comparte algunas de las características esenciales.
Añadido a esto, la cámara M10-R cuenta con una pantalla trasera TFT de 3 pulgadas, así como rangos ISO de 100 – 50000 junto a procesadores de imagen Maestro II y un sistema de enfoque manual de pantalla dividida de Leica.
En lo que respecta al funcionamiento, esta cámara presenta diales y botones manuales que proporcionan al usuario control total sobre aspectos como el ISO, la apertura y la velocidad de obturación.
No obstante, el botón ISO puede generar incomodidades, tanto al momento de intentar hacerlo aparecer como en su manejo. En el caso de los ajustes relacionados con la unidad, el soporte de exposición y otros, deberás acceder a ellos adentrándote en los menús, aunque estos pueden resultar sencillos de organizar, ya que los mas usados tienden a presentarse en la primera pantalla.
De cualquier manera, los telémetros de Leica tienden a estar mas enfocados en proporcionar una experiencia táctil que a conquistar en la parte técnica.
Estructura elegante y eficiente
Por otro lado, el MR-10 cuenta con un cuerpo metálico montado a mano, continuando así la labor de perfeccionamiento llevada a cabo por Leica a lo largo de casi un siglo, logrando un acabado excepcional. Esto permite que la cámara resulte ideal tanto para la fotografía de turismo como la callejera.
Sin embargo, aunque las apariencias engañen, esta cámara puede resultar pesada, generando incomodidad tras un largo rato debido a la falta de agarre.
El sistema de enfoque manual y el visor óptico son otras de las características estándar de Leica presentes en este modelo donde su facilidad de uso esta condicionada por la lente.
En caso de que optes por el enfoque manual, este podría ofrecerte algo de dificultad al momento de manejarlo tomando en cuenta el exigente sensor de cuadro completo de 41 megapíxeles y su profundidad de enfoque altamente fina.
La pantalla dividida resulta gratamente intuitiva en la que, una vez te adaptas a ella, te resultará más satisfactoria de usar que el enfoque automático.
En lo que respecta a la velocidad de disparo, esta no constituye una prioridad dentro de las funcionalidades de esta cámara, aunque, puedes tener la oportunidad de capturar 10 fotos a 4,5 fps antes de que el búfer de 2GB llegue a su capacidad limite.
El obturador de la M10-R es en extremo silencioso, siendo de gran utilidad en situaciones donde requieras tomar fotografías callejeras sin llamar la atención de la persona cuya imagen deseas capturar.
¿Y cuál es el veredicto final acerca de la calidad de la imagen? Las fotos tomadas con esta cámara son muy bien logradas en términos de nitidez y reproducción del color, aunque puede que la consideres un poco plana para la captura de paisajes naturales. No obstante, esto puede solucionarse sometiendo las imágenes a un poco de edición. En el caso de la toma de fotografías a personas, la M10-R resulta bastante eficiente, especialmente en el efecto aplicado en los tonos de piel.
Lo malo es su precio: 8.000 euros solo por el cuerpo, ya que la lente Summilux-M 50mm f / 1.4 cuesta unos 4.000 euros más. Tenéis más detalles en leica-camera.com.