Aún no hemos llegado allí de forma masiva, pero ya se está analizando el riesgo de la contaminación en Marte y en la Luna, y la NASA está liderando dicho estudio.
La organización ha actualizado sus políticas para asegurarse de que los humanos no contaminen dichos mundos, de que no llevaremos organismos u otros contaminantes de la Tierra y que no traermos nada raro por aquí.
Comentan algunos detalles en Twitter, donde Jim Brindestine indica que en sus nuevas políticas tendrán datos sobre ese compromiso antes de las próximas misiones de Artemis. Creen que es la única forma de proger los descubrimientos científicos y el medio ambiente de la Tierra, permitiendo al mismo tiempo una exploración humana dinámica e innovación comercial en la Luna y en Marte.
NEWS: We are updating @NASA’s policies to match our goals and capabilities. We will protect scientific discoveries and the Earth’s environment, while enabling dynamic human exploration and commercial innovation on the Moon and Mars. More: https://t.co/4lytWlSDyi
— Jim Bridenstine (@JimBridenstine) July 9, 2020
Al llevar robots a los diferentes planetas (o satélites), podemos estar llevando organismos que afecten a una posible vida extraterrestre, tal y como ha ocurrido en la historia de nuestro planeta en varias ocasiones (aplicándolo a diferentes civilizaciones). Ya no se trata solo de enviar virus o bacterias, hablamos de productos químicos que puedan reaccionar de alguna forma con organimos desconocidos.
Por otro lado también quieren garantizar que no se traerá ningún contaminante extraterrestre a nuestro planeta, ya que «solo nos faltaba eso».
De momento son dos directivas provisionales:
– Una enfocada en misiones robóticas y tripuladas que viajan hacia y desde la Luna de la Tierra. Quieren activar una exploración sostenible de la Luna al tiempo que salvaguardan la ciencia futura en las regiones permanentemente sombreadas.
– Otra concentrada en la contaminación biológica para las misiones Tierra-Luna a Marte. La agencia dice que utilizará los datos y la experiencia adquirida a través de pruebas en tierra para conjurar pautas y desarrollar capacidades para monitorear procesos biológicos asociados con la presencia humana en la exploración espacial. También tiene como objetivo desarrollar tecnologías para mitigar la contaminación, como herramientas y técnicas de eliminación de desechos más efectivas.
Aunque tienen previsto viajar a la Luna en 2024, recordad que el presupuesto ha sido cancelado, por lo que es posible que tengamos que esperar algo más.