El coronavirus que está infectando a miles de personas en China está afectando a empresas de todo tipo, incluyendo a las que fabrican paneles LCD y teléfonos inteligentes. Muchos empleados no pueden salir de casa, hay ciudades enteras cerradas, y todo esto puede provocar un aumento de los precios y una escasez de suministros en todo el mundo.
Así lo han declarado los principales fabricantes de paneles LCD y OLED en el país, quienes creen que la capacidad total de producción de pantallas LCD podría reducirse en un 10 por ciento, incluso en un 20% si la crisis continúa a este ritmo durante el mes de febrero.
Hay varios proveedores de módulos externos que ya habrían dejado de producir, y si le sumamos la escasez de mano de obra y componentes clave, el resultado es menos cantidad y precios mayores.
El medio South China Morning Post dice que es probable que los principales vendedores de teléfonos inteligentes de China también envíen un cinco por ciento menos de teléfonos inteligentes en 2020 de lo previsto anteriormente, por lo que afectaría a marcas como Xiaomi, OPPO, Vivo y Huawei.
En el mercado global veremos un dos por ciento menos teléfonos inteligentes este año de lo previsto, aunque algunas marcas, como Huawei, son más optimistas y ya han dicho que reanudado la producción de dispositivos de consumo con las operaciones ahora restauradas después del feriado del Año Nuevo Lunar.
Sea como sea, está claro que la escasez de móviles no será el mayor problema si no se consigue parar los pies a esta nueva epidemia.