Si tenéis una impresora 3D y queréis ver una versión de vuestro logo tridimensional, aquí os dejamos algunos sencillos pasos que podéis realizar para conseguirlo.
– Obtened una versión del logo en formato SVG. Si solo lo tenéis en PNG, podéis usar un conversor online como pngtosvg.com, por ejemplo, aunque lo ideal es tenerlo en SVG sin necesidad de hacer transformaciones posteriores.
– Cread una cuenta gratuita en tinkercad.com, y cuando estéis dentro del panel, pulsad en Importar archivo SVG, en la parte superior derecha. Una vez importado, lo tendréis ya con relieve en el panel de trabajo. Ahora podéis cambiar su tamaño, añadir objetos y demás, pero lo mejor es exportarlo directamente en formato STL para realizar los cambios de escala posteriormente. Por supuesto, en este paso 2 podemos aprovechar y realizar una infinidad de cambios para darle más alegría al logo, aunque para ello son necesarios algunos conocimientos de gestión 3D que muchos no tienen, por eso optamos directamente por la exportación. Si al importar el archivo queda más grande que el panel de trabajo, podéis cambiar los tamaños usando directamente el mouse.
– Ahora que ya lo tenemos en formato STL, podemos abrirlo desde nuestro programa de impresión 3D (yo uso Cura). Al hacerlo lo tendremos ya preparado para impresión, y será posible cambiarlo de tamaño y elegir la altura adecuada para que el trabajo quede perfecto.
Como veis, el trabajo es sencillo, ahora solo es necesario establecer las variables adecuadas de la impresora 3D y tener paciencia durante la impresión.