Una vez que Intel ya ha cerrado oficialmente el acuerdo de adquisición de Mobileye, compañía israelí especializada en tecnología de visión para sistemas de asistencia de conducción avanzada y conducción autónoma, la compañía se centra ahora en la construcción de una flota de unos 100 vehículos de conducción totalmente autónoma (nivel 4 SAE) para realizar las primeras pruebas por carreteras de Estados Unidos, Israel y Europa.
Acorde al anuncio, estos vehículos de prueba combinarán las capacidades propietarias de Mobileye, incluyendo la visión por ordenador, la detección, la fusión, el mapeo y la política de conducción, junto con las plataforma de computación abiertas de Intel y la experiencia en centros de datos y tecnologías de comunicación 5G.
La flota estará compuesta por vehículos todo tipo perteneciente a diferentes marcas, pretendiéndose demostrar que la solución híbrida de Mobileye e Intel es capaz de adaptarse a cualquier tipo de aplicación o uso.
La idea no es sólo poner a pruebas estos vehículos sino además entrenarlos a los diferentes estilos de conducción existentes en diferentes regiones para que se puedan adaptar a cualquier lugar donde vayan a transitar. Se realizarán además demostraciones ante clientes actuales y potenciales para convenverles de las ventajas de la solución y además servirá para poder trabajar con los distintos reguladores para que los vehículos cumplan con las normas de conducción existentes en cualquier lugar.
De esta manera, Intel trata de acelerar el desarrollo de su negocio enfocado en la conducción autónoma, aunque no es la única a este respecto, ya que existen otras compañías que también dispone de flotas de vehículos autónomos para pruebas, de modo que Intel debe posicionarse para ser un digno competidor en este mercado emergente.