La Inteligencia Artificial está llegando a tal punto que en un futuro quizás no podamos ser capaces de diferenciar las voces de personas humanas de las voces generadas sintéticamente mediante sistemas de Inteligencia Artificial. Con ello en mente, desde la compañía australiana DT se ha desarrollado un dispositivo vestible que se coloca detrás de la oreja para que pueda ser capaz de notificar a los usuarios cuando estos están escuchando voces sintéticas en lugar de personas.
Y lo hace mediante notificaciones basadas en el enfriamiento de la piel de la parte posterior del cuello gracias a la pieza termoeléctrica integrada en lugar de usar vibradores, luces o sonidos. Con ello se pretende representar la frialdad de las voces al no estar detrás de las mismas personas humanas.
Este dispositivo, que se ha desarrollado a modo de prototipo, funciona a través de una aplicación para iOS, la cual envía el audio recogido a un sistema de red neuronal en la nube perteneciente a TensorFlow, de Google, que ha sido entrenada mediante muestras de voces sintéticas de Inteligencia Artificial para que, en base a patrones comunes, la misma pueda ser capaz de detectarlas.
En este sentido, la compañía ha querido hacer frente a la era de la pos-verdad, la cual señala que está todavía en sus inicios. Y el nombre del dispositivo también es curioso, llamado Anti AI AI. Para quienes quieran saber más del propio dispositivo, incluso a niveles más técnicos, toda la información está disponible en una entrada de blog.
Eso sí, el sistema ya fue hackeado y desde la compañía ya han publicado el código del sistema en GitHub para posibilitar mejoras a la misma a lo largo del tiempo. Lo único que no se sabe aún es si Anti AI AI no dejará de ser sólo un experimento o se convertirá en un dispositivo que se lance finalmente al mercado.