Las posibilidades que ofrecen las redes 5G son enormes, aunque aún falten varios años para que podamos tenerlas en el día a día. Aún así, hemos podido probar una de ellas en el MWC de Barcelona, y en el vídeo superior os la explicamos.
Se trata de un proyecto que muestran en el stand de Telefónica, desde donde se controla un coche eléctrico situado a 70 km de distancia usando una red 5G. Desde la misma conexión sería posible controlar decenas de coches al mismo tiempo, con latencias de poco más de 4 milisegundos.
Cuando hablamos de 4G pensamos en alta velocidad desde dispositivos móviles, útil para navegar por Internet, enviar y recibir ficheros, ver vídeos de forma fluida sin usar WiFi… pero 5G va mucho más allá. El objetivo de esas redes es transformar el internet de las cosas, permitir que se envían órdenes a objetos a una velocidad que permita seguridad, fiabilidad y latencia prácticamente inexistente, algo que con 4G no es posible.
Controlar un coche a distancia puede ser extremadamente útil para las empresas de transporte, o para operaciones de rescate, y con 4G no podríamos permitirnos el lujo de un pequeño error de conexión, ya que estamos hablando de un coche real que podría provocar accidentes.
La demostración que os mostramos en vídeo genera bastante optimismo, aunque aún tengamos que esperar bastante para poder ver productos reales en el mercado.